Racismo, de las estructuras del estado a la cotidianidad: Mayas Indígenas | Ep03
TRANSCRIPCIÓN
Producción, voz y edición: Amanda Chiquitó
Con apoyo de: Oswaldo J. Hernández
Audio
//vocalista de la Puga//
Elsa Amanda: Recientemente las declaraciones de Alejandro Puga, vocalista de una banda de Rock guatemalteca, El Tambor de la Tribu, refiriéndose hacia la forma de vestir de mujeres indígenas, refuerzan y reafirman una vez más las estigmatizaciones que tiene la sociedad hacia las mujeres mayas, y es que las expresiones de racismo en este país han sido asociadas mayormente por la forma de vestir, el color de piel y la forma de hablar. La carga es mucho más fuerte en las mujeres, porque son ellas quienes por muchos años han sido las portadoras de los elementos más visibles de la identidad y cosmovisión como la indumentaria, el idioma.
Música de transición
Elsa Amanda: En este tercer episodio, les contaremos dos historias, la de una mujer maya kiché y un hombre Kaqchikel. Cada uno comparte su experiencia de cómo es vivir a diario en un país racista como Guatemala. Intentar participar políticamente o bien, conseguir el menosprecio cotidiano debido a que no es fácil hablar el español como un segundo idioma. ¿Cómo hombres y mujeres afrontan el racismo e impulsan procesos de cambios estructurales en Guatemala? Aquí lo contamos.
Desde la época colonial recordaremos que había pueblos de indios y pueblos de ladinos. La vía de Salcajá es un pueblo de ladinos, nosotros vivimos muy cerca de Salcajá y vivimos el racismo interpersonal con los pobladores de este municipio, nos trataban de indios, maría, de una manera despectiva, de una manera que nos sintiéramos siempre minimizados por ellos a nivel comunitario y de manera interpersonal y eso toda la vida, en la universidad de San Carlos, en toda la época estudiantil fue siempre una convivencia y que hacer difícil en la vida cotidiana y eso se asumió como un reto ante lo que nosotros queríamos, yo principalmente me propuse a estudiar, me propuse a salir adelante y demostré que nosotros podíamos retarnos de tú a tú en el ámbito intelectual y en el éxito académico.
Elsa Amanda: Blanca Estela Alvarado, es Pedagoga, tiene una maestría en Educación Bilingüe Intercultural, fue catedrática en el Centro de Aprendizaje de Lenguas de la Universidad de San Carlos de Guatemala, CALUSAC, Comisionada Presidencial contra la Discriminación y el Racismo CODISRA y postuló como vice presidenciable por el partido URNG Maíz en el año 2019.
En este proceso ella enfrentó una serie de ataques racistas por las redes sociales y otros medios de comunicación. Aquí un audio de la denuncia que presentó junto a sus compañeros de campaña.
Audio
//Denuncia de URNG//
Ella ahora nos cuenta cómo ha sido estigmatizada en los distintos espacios en los que se ha formado como académica, laborado y ejercido su derecho a participar en un partido político, todo esto por ser una mujer maya K´iche y como los prejuicios más duros siguen pesando sobre las poblaciones mayas.
Blanca Estela
Se ha estigmatizado a los pueblos indígenas, a las comunidades y a las personas, llamándoles tishudos, indios, tontos, perezosos y esas han sido las justificaciones desde la época colonial y la justificación solapada del racismo, pero también en la vida cotidiana cuando una se encuentra con sus compañeros en la escuela. Yo por ejemplo fui descalza a la escuela primaria y mis compañeritos se paraban sobre mis pies descalzos y se reían, se mofaban porque no tenía calzado y ya en la universidad como nosotras portamos el traje para recibir clases, nos decían a ustedes les gusta utilizar el uniforme de esclavos.
Pero estos señores que hacen este tipo de descalificaciones a los idiomas mayas, las indumentarias indígenas, no saben cuánto valor y significado tienen para nosotros y como a pesar de todas esas actitudes seguimos valientes porque para nosotros usar el traje, hablar el idioma, el vivir nuestra cosmovisión es una opción política para demostrarles que nosotros estamos y recordarles que tenemos derecho a ser lo que somos en este país tan diferenciado, tan desigual e injusto como Guatemala.
Elsa Amanda (algún efecto de voz de lectura): “Aunque paga el IVA de las candelas, del machete, etc., el impuesto no llega a las arcas del Estado pues no declara…, ¿para qué? Además, es generalmente bolo y machista y necio por principio… Sólo Dios sabe lo que siente el indígena, mientras juegan en su polvoriento y excrementoso patio, sus últimos tres hijos de 2, 3 y 5 años, pues la de siete anda buscando leña…”.
Este es un fragmento de una columna de opinión publicada en el periódico la hora en el año 2014, escrita por Martín Banús. En su discurso de odio a lo largo de todo el texto se leen elementos de racismo y estigmatización de los que habla Blanca Estela. Esta no es la primera ni la última columna que se reproduce en medios de comunicación, excusándose en la libertad de expresión.
Elsa Amanda: Blanca recuerda también su paso por CODISRA, como una de las comisionadas de esta entidad, que incluso siendo parte de un equipo gubernamental, la forma en que está construido este país y las distintas configuraciones de poder, no le permitieron ejercer con total libertad su cargo.
Blanca Estela:
Y también ya en ámbitos de poder y de relación recuerdo que como Comisionada Presidencial contra el racismo a nosotros al principio en el gobierno de Alfonso Portillo no nos daban la oportunidad de entrar al gabinete de gobierno, siendo que nuestro fundante si lo contemplaba, entonces tuvimos que poner una denuncia pública para demostrar que nosotros estábamos luchando contra el racismo empezando por nosotros, nos habían discriminado alejándonos de las reuniones de gabinete.
Elsa Amanda: Llegar al plano de la política y participar en una contienda electoral es sumamente difícil y supone un desafío para las mujeres y poblaciones indígenas. Llegar hasta las estructuras de poder y decisión y querer hacer un cambio implica que la sociedad está lista para aceptar la pluralidad. Cualquier espacio dentro de los tres poderes del Estado es una oportunidad para generar cambio.
Pero para las mujeres indígenas que deciden someterse al proceso de elección popular, los datos no son nada alentadores. Actualmente, a nivel nacional, de 340 alcaldías solo 12 son lideradas por mujeres. Y de ellas, solo una es una mujer maya Kaqchikel. Dentro del Congreso, de 160 diputados solo 26 mujeres ocupan una curul. Únicamente 3 son mayas: una Poqomam, una Mam y otra Kaqchikel.
Para Blanca, las expresiones de racismo salen a relucir con mayor fuerza cada 4 años, cuando alguien proveniente de una población indígena se postula a un cargo de elección popular. El racismo es uno de los factores determinantes para que los pueblos indígenas no ocupen estos espacios. Ella nos habla al respecto de los ataques cibernéticos por los que fue blanco de burla y que giraban en torno a su identidad.
En esa ocasión nosotros como binomio presidencial, constituido por dos indígenas, un varón Ixil y yo como Kiche, tuvimos la mofa de un netcenter, el cual incluye no solamente el racismo contra pueblos indígenas, sino la discriminación hacia la mujer porque en esta expresión se incluye la persona de Thelma Aldana porque decía a Thelma Aldana no le han dado la credencial y a la señora de limpieza si ya se lo dieron, poniéndonos a nosotras como mujeres tanto ladinas como indígenas poniéndonos en una posición de odio racial y de discriminación contra la mujer, eso para mí significa que los indígenas solo podemos ser los vendedores del mercado, la sirvientas de los otros, ser las señoras de la limpieza de otros o esclavos o mozos colonos todavía a nuestros días y no tenemos nosotros el derecho de ejercer el derecho de la participación política y atrevernos a dirigir este país tan injusto.
Elsa Amanda: Blanca dice que es importante elevar acciones que traigan a la reflexión que el racismo no está bien y que tiene que cambiar en esta sociedad.
Lo primero que hicimos fue poner la denuncia, porque si nosotros no ponemos la denuncia y por cierto la hicimos publica, porque es como una escuela también para la población, para que aprendan, que no siempre van a poder hacer lo que se les dé la gana en ese sentido.
Elsa Amanda: Los efectos del racismo en la vida de las mujeres y hombres de las distintas poblaciones indígenas tienen un impacto muy fuerte, en algunos casos como el de Blanca, estas experiencias la llaman a seguir luchando para que pueda haber un cambio en la manera de ver a las mujeres indígenas.
Como persona me afectó las emociones por el hecho de que recordé toda mi trayectoria de vida y recordé los momentos difíciles que pasé en mi juventud y en mi niñez y pues como persona eso me hizo sentir triste, pero por otra parte como actora política, como una mujer participando en la contienda electoral sentí que precisamente por esas cosas, por esas actitudes, por esos hechos, es que es necesario participar en política y es necesario cambiar las estructuras institucionales de este país racista de origen. Hay que ejercer y precisamente en el ámbito político en donde se puede hacer algo contundente en contra de estas cosas de las cuales hemos sido actores pasivos y que debemos cambiar de raíz.
Elsa Amanda: En otras palabras, el racismo cotidiano también afecta la forma en que las poblaciones indígenas intentan participar de los espacios políticos. Desafiar el sistema desde adentro, resulta incómodo para la estructura de poder en Guatemala. Un indígena en un puesto de decisión es incluso considerado una amenaza…
Música de transición
Elsa Amanda: Pero si hablamos de contenidos racistas hacia pueblo indígenas recordemos como el ex presidente de Guatemala, Jimmy Morales, en el programa Moralejas, también fomentaba la estigmatización de la población maya.
Audio
//Moralejas Sketch//
Estos discursos racistas se instalan colectivamente desde los medios masivos de comunicación. Y en consecuencia, los pueblos indígenas enfrentan estigmatizaciones y prejuicios. Si las mujeres mayas sufren discriminación por sus indumentarias, por algo más visible, los hombres indígenas lo deben sobrellevar igual aunque no necesariamente por la forma en que visten.
Pero esto no siempre fue así. En cada región o identidad, los hombres también portaban su indumentaria. Hoy en día los municipios que mantienen esta postura política desde la vestimenta, tanto en hombre y mujeres, son Nahuala, Todos Santos Huehuetenango, Santiago Atitlán, Sololá entre otros. Como resultado, este es otro factor importante por el cual el racismo se incrementa en hombres que lo portan.
Emerson Simón es maya Kaqchikel, sale a trabajar todos los días con su indumentaria. Cuenta que en su comunidad muy pocos hombres la utilizan, lo que le ha generado también ser blanco de burlas y de expresiones de racismo.
Emerson:
El racismo se da de distintas maneras entre hombres y mujeres. Las mujeres porque en ella se ve mucho más la forma como visten, que son indígenas, los hombres no, sin embargo, los hombres dan de notar por el color de piel, por cómo se expresan y como hablan, pero de una u otra manera si se sufre de racismo si uno es de un pueblo indígena.
Elsa Amanda: Para las personas de pueblos indígenas los espacios públicos suelen ser espacios en donde recibe más racismo y discriminación, desde recibir mala atención en restaurantes o negocios y hacerles esperar en los servicios como hospitales y juzgados, en algunos casos el idioma es el detonante para los malos tratos. Las excusas de no comprender el idioma en el cual las personas se expresan es una justificación más del racismo.
Es una situación de la cotidianidad, en algún momento ya hemos internalizado tanto lo que es el racismo que ya ni siquiera lo distinguimos, regularmente porque se hacen muchos chistes racistas entonces como que causara gracia, muchas veces se manifiesta hacia las mujeres por su forma de vestir, su forma de hablar pero también se manifiesta a los hombres, no porque vistan una indumentaria maya, sino que por su color de piel y aun por la forma en la que hablan, en algún momento alguien dijo que los indígenas se les nota hasta por su forma de hablar y se nota claro porque regularmente los indígenas son bilingües, entonces aprenden hablar con su idioma materno y luego aprenden el español, por lo tanto vienen hablando desde la lógica de su idioma materno y también el racismo se da porque los pueblos indígenas no tienen acceso libre a ciertos espacios públicos aunque podemos pensar que en Guatemala no se tiene ese tipo de restricciones, sin embargo en muchos comercios, en algunos espacios aparentemente para la gente de clase o de categoría pues tampoco tenemos ese libre acceso y cuando nos ven ahí, nos ven de manera muy diferente a veces hasta con menosprecio.
Elsa Amanda: a pesar de que Guatemala cuenta con una ley de idiomas nacionales, no se garantiza el cumplimiento de la misma. Emerson es maya hablante del Kaqchikel y nos cuenta que los elementos del idioma y la indumentaria incrementan las expresiones de racismo hacia él.
En mi comunidad no he sido víctima de racismo porque vivo en una comunidad en dónde el 99.5% son kaqchikeles, sin embargo en otros espacios sí, a uno le dan a entender que por la forma en la que uno viste no debería de estar en estos lugares o está en un lugar equivocado. También en algún momento que por mi forma de hablar se entendía o daba entender que era indígena porque hablamos de manera diferente y acento que utilizamos es de la gente que compone la comunidad lingüística Kaqchikel entonces se notaba y le dije si claro porque yo tengo que pensar en dos idiomas cuando te hablo, tengo pensar como lo diría en mi idioma y como te lo diría en tu idioma.
Elsa Amanda: Una de las expresiones de racismo con el que se les estigmatiza a los hombres indígenas es el tipo de trabajo que realizan o que en la idea de la población dominante deben de hacer y esto nos dice Emerson.
Los hombres únicamente están para hacer el trabajo duro y los trabajos inferiores que la población mestiza no pueda hacer, claro todo trabajo es digno pero regularmente los indígenas nos remiten al ámbito doméstico, los trabajos de cuidado y eso se ve mucho más con las mujeres porque cuando ven a una mujer indígena en espacios públicos y esto se puede decir en la capital, las ven como empleadas del hogar, es una cuestión en la que la población nos ven inferiores como que no tuviéramos capacidad e inteligencia para desarrollarnos en los ámbitos igual a ellos.
Elsa Amanda: Emerson piensa que la forma de hacer consciencia a las poblaciones no indígenas es generar espacios de análisis a todo nivel, solo teniendo información se puede generar algún cambio.
Una de las acciones es la sensibilización si todas las personas no tienen información y no acceden a una buena información de cómo es el racismo, de cómo se da desde la cotidianidad entonces nunca lo van a entender y es lo que menos existe y creo que debe de ser un compromiso de Estado diciendo todo el aparato estatal, las instituciones, las dependencias y todos para erradicar esa parte sin importar cómo hablamos, cómo vestimos, cómo es el color de nuestra piel, sin importar nuestra estatura y que todos somos iguales independientemente de nuestros rasgos físicos y nuestra forma de vivir.
Para entender un poco mejor estas dinámicas cotidianas de racismo, hablamos con la académica Eva Tecún León, politóloga, mujer maya Kiche y representante del Movimiento de Mujeres Indígenas Tzununija. Ella cuenta que hay grandes desafíos y responsabilidades de las entidades encargadas de velar por que se cumpla la política pública sobre racismo y discriminación en este país.
Eva Tecún:
La CODISRA es la encargada de darle vida o hacer posible que se cumpla la política pública para la convivencia y eliminación del racismo en Guatemala. Esta política pública establece varias acciones específicas, como lo es la prevención, la formación, la desnaturalización de la discriminación y el racismo y también el hacer que se cumpla la ley según lo estipulado en el artículo 202 bis del código penal, de hecho la CODISRA quería o tendría la capacidad de elevar dentro del congreso de la república, la necesidad de poder ampliar este artículo 202 bis, de poder también incluso elevar la discusión sobre el racismo como tal en Guatemala y no solo quedarse con la discriminación racial.
Sin embargo hasta el momento, la comisión no ha sido capaz de generar o ser la rectora de promover un dialogo nacional en donde se pueda cuestionar el racismo, en donde se pueda elevar la necesidad de alguna u otra forma cuestionar incluso los contenidos educativos que tenemos en el sistema de nuestro país, entonces vemos una CODISRA que su papel es nada mas de alguna u otra forma, emitir informes al sistema de naciones unidas alguno que otro seguimiento a casos paradigmáticos y no vemos como esa rectoría que debería de tener incluso en todos los ministerios que forman parte del gobierno de Guatemala.
Elsa Amanda: Hace falta mucha claridad por parte de la sociedad para comprender que cuando se habla de racismo hacia pueblos indígenas se habla de estructuras creadas y establecidas, desde un sistema de Estado Nación. Eva Tecún lo determina así.
Hace falta ganas de conocer la pluralidad, de conocer la diversidad del mundo y de comprender de que no somos seres homogéneos, sino comprender que somos seres diversos y que existimos diferentes culturas, existimos diferentes pueblos con diferentes formas de organización con propias formas de pensar o propias formas de hacer las cosas, entonces creo que hace falta esa apertura tener esa o amplitud, una visión amplia dentro de la sociedad. Lamentablemente muchas veces se trata o se analiza esta problemática como algo muy personal, nunca hago de menos a nadie, yo no soy racista, esta problemática no es una problemática personal nada más, es una problemática institucional, yo creo que el comprenderla de esa manera y tener capacidad de cuestionarla es lo que hace falta, en ese sentido creo que con el simple hecho de cuestionar de cómo nos han educado es un buen comienzo para que exista la conciencia en cuanto al abordaje de racismo.
Elsa Amanda: Negación al derecho de autoidentifición como Xincas, Instalación de proyectos extractivos en territorios ancestrales sin consultarle a las poblaciones indígenas, migración y falta de inversión en la población Garífuna, estigmatización a las poblaciones mayas al participar en procesos de elección popular, son ejemplos de cómo funciona el racismo estructural en Guatemala, el racismo cotidiano es solo un tentáculo de los muchos con el que funciona el racismo en este país.