Marco Pappa obtuvo una reducción de condena que le permitirá salir de la cárcel. El futbolista, quien acumula tres sentencias por golpear a dos de sus ex parejas y lleva siete años en el foco mediático por alcoholismo y violencia, podría volver a las canchas del fútbol profesional gracias a Gustavo Juárez. Este abogado ha logrado librar de prisión a dos futbolistas para convertirlos en estrellas del Deportivo San Pedro, su equipo de segunda división.
El futbolista Marco Pablo Pappa Ponce está preso desde agosto del 2020 por violencia contra la mujer. Actualmente se encuentra recluido en la cárcel Mariscal Zavala, purgando una condena de cinco años, después de que el 14 de febrero de 2022 fuera hallado culpable de violentar físicamente a su exnovia, Andrea Aparicio. Sin embargo, hace diez días, el 1 de agosto de 2022, recibió una reducción de la pena avalada por la Sala Segunda de Apelaciones del ramo de Femicidio y se ordenó su libertad inmediata.
De esta forma, una Sala de Apelaciones especializada en Femicidio ha dejado libre al futbolista, aunque ha sido sentenciado tres veces por golpear a sus parejas. La primera fue en 2018, cuando el futbolista fue denunciado por Francesca Kennedy y condenado a 5 años de prisión conmutables por el delito de violencia contra la mujer en su manifestación física. En ese momento, fue beneficiado con una fianza equivalente a Q9 mil. En 2020 recibió la misma sanción, de cinco años de prisión, por el mismo delito cometido contra Andrea Aparicio.
Sin embargo, aunque recibió la reducción de la pena que se le impuso en febrero de este año, su defensa aseguró el 8 de agosto que seguía en prisión, debido a que la jueza Claudia Elvira González del juzgado segundo de Femicidio aún no autorizaba la libertad del futbolista.
“Es un terrible mensaje para los hombres violentadores, se minimiza el tema de la violencia contra una mujer y en cambio se prioriza su posible regreso a jugador de fútbol”, opina Stephanie Rodríguez, abogada especializada en Derechos Humanos.
De hecho, la liberación de Pappa dos años y medio antes de cumplir la totalidad de la condena, hizo que periodistas deportivos y devotos del fútbol pusieran tintes románticos a su caso y se pregunten: “¿en qué equipo jugará?”.
Pappa podría tener ya equipo, se trata del deportivo San Pedro, un modesto equipo de San Pedro La Laguna, Sololá, que juega en la segunda división. El presidente de este equipo es su abogado, el licenciado Gustavo Juárez, quien aseguró a No Ficción que jugará en el San Pedro para pagarle la deuda por haberlo defendido.
La deuda de Pappa con su abogado
“Yo tengo varios clientes en Mariscal Zavala, me toca llegar seguido. Ahí adentro me encontré a Maco [sic]. Él me dijo que se estaba quedando sin dinero para pagar un abogado, me pidió que lo defendiera y yo le dije que lo sacaba de la cárcel si jugaba un torneo para mi equipo: el Deportivo San Pedro, de la segunda división”, explicó a No-Ficción Gustavo Juárez, abogado conocido por defender futbolistas y funcionarios señalados de corrupción.
El 10 de enero del 2018, la primera vez que Marco Pappa fue detenido por violencia machista, Gustavo Juárez también estuvo presente en el juzgado de Femicidio para lograr que el futbolista recibiera una medida sustitutiva.
Juárez también es representante futbolistas a través de la firma Golden Dreams GT. El abogado de Pappa lleva más de dos décadas en el mundo del deporte y es famoso por sacar de apuros a los futbolistas.
Durante 2022 Juárez ha logrado la liberación de dos futbolistas acusados de violencia contra la mujer. El primero fue Kendel Herrarte, quien jugaba para Antigua Guatemala de la liga mayor y fue capturado a principios de año acusado de golpear a su esposa por segunda ocasión. Herrarte, estuvo en el Preventivo para Varones de la zona 18 hasta que Juárez le consiguió una medida sustitutiva y, aunque sigue ligado a proceso, jugó aproximadamente cuatro meses para el Deportivo San Pedro y actualmente milita en el Deportivo Coatepeque de la primera división.
Al ser cuestionado sobre el hecho de contratar en su equipo a jugadores responsables de violencia contra la mujer, Juárez respondió: “La obligación del Estado es reinsertar a la sociedad a cualquier delincuente, pero el Estado no hace nada, entonces el Deportivo San Pedro le abre las puertas a Pappa para que pueda jugar y se recupere, es un gana gana, el recupera su ritmo y se va a otro equipo”.
Además, Juárez ha defendido a otros futbolistas acusados de delitos. En julio del 2015 el mediocampista Marco Ciani, fue acusado de homicidio por arrollar a un joven con su vehículo cuando conducía en estado de ebriedad y Juárez logró que saliera libre de cargos a cambio de pagar una indemnización a la familia del fallecido.
Juárez también fue defensor del ex alcalde de Chinautla Arnoldo Medrano, y de la ex vicepresidenta Roxanna Baldetti, durante la etapa intermedia del caso Cooptación del Estado y durante el juicio del caso Lago de Amatitlán.
“Yo no le he cobrado un solo centavo a Pappa, he cumplido con mi parte de defenderlo y cuando quede en libertad le tocará a él cumplir y jugar un torneo para el Deportivo San Pedro”, afirma Juárez.
Juárez es el cuarto abogado que representa a Marco Pappa en su vasto trayecto por los tribunales. El primero fue Juan Carlos Palomo, quien lo defendió durante el primer proceso penal en 2018. En 2020 fue defendido por el polémico abogado Juan Pablo Gutierrez, quien murió de pancreatitis en su celda en Mariscal Zavala cuando guardaba prisión por agredir a su esposa; posteriormente, Pappa fue defendido por Alejandro Arriaza hasta mediados de mayo de 2021.
Siete claves del trayecto violento de Marco Pappa
Antes de conocer públicamente las denuncias en su contra, Pappa era el rostro del fútbol de Guatemala en el plano internacional. El futbolista, quien nació en Ciudad de Guatemala el 15 de noviembre de 1987, inició su carrera en el Club Social y Deportivo Municipal en 2004. Dos años después, a sus 20 años, fue contratado por el Chicago Fire, un equipo de media tabla de la máxima liga de fútbol de Estados Unidos, la Major League Soccer (MLS). En ese momento, Pappa pintaba como una jóven promesa en el mercado internacional, su fichaje estaba valuado en $250 mil según el portal especializado Transfermarkt.
En 2012 Pappa llegó al fútbol Holandes, tuvo un paso regular en el SC Heerenveen de la máxima categoría del fútbol de aquel país. Apenas jugó 11 partidos y no marcó gol; casi ni jugaba, a pesar de eso Pappa era un referente en la región incluso apareció en un anuncio televisivo para la marca Pepsi junto a futbolistas como Lionel Messi.
En 2014 regresó al fútbol estadounidense para jugar con el Seattle Sounders, un equipo del Estado de Washington y en septiembre de ese año fue campeón de la US Open Cup, el único campeonato que ha logrado en el extranjero. Su carrera parecía despegar de nuevo, pero fue en este equipo de Seattle cuando, diez meses después, sus propias acciones violentas y problemas con el alcohol hicieron caer en picada su carrera.
1. Su primer arresto
El domingo 19 de julio del 2015, Marco Pappa fue detenido a las 8:30am cerca del centro de Seattle, manejaba su vehículo a 135 kilómetros por hora, cuando el límite es de 93. La concentración de alcohol en su sangre también doblaba la cantidad permitida, según el reporte policial del incidente.
Pappa fue suspendido y enviado a un programa de salud conductual y abuso de sustancias promovido por la máxima autoridad del fútbol estadounidense, la Major League Soccer. La infracción de tránsito por manejar ebrio sería la primera bandera roja sobre el comportamiento del futbolista.
2. Una puñalada de 3 pulgadas
Cinco meses más tarde de su primer arresto, el 15 de diciembre del 2015, Marco Pappa fue dado de baja del Seattle Sounders, el club lo incluyó en una lista de nueve jugadores con los que ya no deseaba renovar contratos. Pappa fue transferido al Colorado Rapids, otro equipo de la misma liga estadounidense.
En enero se hizo público que tan solo dos días después de que Pappa fuera sorpresivamente desechado por el equipo con el que fue campeón, el futbolista guatemalteco había estado implicado en un incidente que no pudo explicar a la policía.
A las 2:40 am del 17 de diciembre, la policía de Seattle recibió una llamada que alertaba sobre una persona herida. Al llegar al apartamento ubicado en la avenida Westlake de Seattle, en el estado de Washington, la reina de belleza, Stormy Keffeler, de 23 años, abrió la puerta y dijo que su novio, Marco Pappa, acababa de llegar con una herida de arma blanca. Sin embargo, esta fue la primera contradicción reportada por los agentes, ya que cuando Keffeler llamó al 911, dijo que el incidente había ocurrido dentro del apartamento.
Pappa, de 27 años en ese entonces, apareció ante los agentes con una herida vertical de 3 pulgadas en el lado izquierdo de su abdomen y fue trasladado a un hospital e intervenido quirúrgicamente. Meses después, el Seattle Times publicó el informe policial, el cual indica que un agente entrevistó al futbolista en español y sus respuestas estuvieron llenas de contradicciones. Según el reporte, Pappa aseguró que fue atacado en la calle cuando volvía de cenar con su novia, cambió el nombre del restaurante dos veces y Keffeler dijo que no se dieron cuenta de la herida hasta llegar a casa.
Pero un cuchillo ensangrentado encontrado en el apartamento generó dudas sobre las confusas declaraciones brindadas por Keffeler y Pappa. Ambos negaron haber tenido una disputa entre ellos. El resultado del controversial suceso obligó a Keffeler a renunciar a su corona de miss Washington y marcó el inicio de la fugaz y poco fructífera etapa de Pappa en su tercer equipo en Estados Unidos.
Aunque, en ese momento, Stormy Keffeler no denunció al futbolista ni informó sobre violencia de género padecida por el futbolista Marco Pappa, cuando en agosto de 2020 salieron a la luz las agresiones sufridas por Andrea Aparicio, Keffeler compartió en su facebook en agosto un mensaje de apoyo a aparicio y compartió dos videos en los que asegura ella ha sido víctima y sobreviviente de la violencia de género y, como informó más tarde al medio Ocote, el causante había sido el futbolista guatemalteco.
Además, en una carta publicada por Ocote, ella dio más detalles de las fuertes agresiones de las que fue víctima por parte de Pappa y reconoció que el abusó de ella mental, emocional, sexual y físicamente. “En sus arranques de ira, el rompió mi teléfono, robó mi dinero, mis tarjetas de crédito y mi identificación. Él me golpeó con el teléfono del hotel, me ahogó y me violó”, informó a Ocote en agosto Keffeler, quien fue nombrada Reina de la Belleza de EEUU en 2020.
3. Pappa obligado a reconocer a su hija
Pappa no solo ha pasado en tribunales por violencia contra la mujer. La primera denuncia en su contra, y quizá la menos conocida, fue en 2016, el mismo año en el que terminó su carrera futbolística en el extranjero. En ese momento, Pappa fue denunciado por no reconocer a una hija y además se negó a realizarse la prueba de adn, explica una nota del medio ConCriterio.
La denunciante fue Deysi Rocío Del Cid, reina de belleza del departamento de El Progreso y madre de la menor. Pappa, que aún jugaba para el Colorado Rapids, no se presentó a las citaciones y el Juzgado Séptimo de Primera Instancia Penal del ramo familiar, declaró en rebeldía al mediocampista y cerró el caso, concluyendo que Pappa debía asumir la paternidad de la menor. Un año después un juez declaró la paternidad y filiación con la niña, actualmente esta aparece en el Registro de Ciudadanos con el apellido del futbolista.
4. Regreso a Guatemala y la primera denuncia
Marco Pappa siguió su camino de indisciplina, no logró acoplarse a su nuevo equipo en Colorado y el 20 de enero del 2017 regresó a Municipal, el equipo donde se formó y debutó profesionalmente en 2006. Finaliza así su carrera en el extranjero, que inició en 2008 y duró 9 años. A la vuelta a su país de origen, el volante fue recibido con algarabía por la afición de Municipal y la directiva del equipo. Sin embargo, poco después en su equipo comenzaron a quejarse de su indisciplina y ausencia en los entrenamientos, mientras que Pappa hacía vida social en esferas de la élite.
A pesar de su denuncia por no reconocer a su hija y de los altercados en Estados Unidos, en febrero del 2017 el empresario Salvador Paiz, presidente de la Fundación Sergio Paíz (Funsepa), le nombró como “héroe de la educación” junto a la modelo guatemalteca-estadounidense Francesca Kennedy, con la que posteriormente se conoció que tenía una relación.
.@FunSEPA da luz verde a 4ta generación de "Héroes por la Educación". Presentan a Marcó Pappa y Francesca Kennedy como nuevos líderes pic.twitter.com/OpAI5rGuiK
— República. (@republicagt) February 8, 2017
Once meses después, el 10 de enero del 2018, Marco Pappa posó con una sonrisa junto a un agente policiaco cuando fue capturado, acusado de violencia contra la mujer. Francesca Kennedy lo denunció de golpearla en septiembre del 2017, la ex pareja de Pappa tuvo que llamar a la Policía para pedir auxilio y cuatro meses después el MP lo capturó.
En una entrevista brindada a Prensa Libre, Kennedy narró que la madrugada del 19 de septiembre del 2017 en su apartamento en la zona 14, Pappa se abalanzó sobre ella y apretó su cuello, ella forcejeó para liberarse pero el futbolista le tapó la boca con un suéter para evitar que sus gritos fueron escuchados por los vecinos.
La modelo aseguró que Pappa la agredió porque ella le cuestionó sobre algunos mensajes de otras mujeres en su celular. Pappa golpeó a Kennedy al menos en dos ocasiones anteriores, pero fue hasta en la tercera que decidió denunciarlo.
Fue la primera vez que Pappa era expuesto como agresor. Era público que golpeó a su ex pareja y el 11 de enero fue ligado a proceso por el juzgado de femicidio de turno, pero lo dejaron en libertad a cambio de una fianza de Q10 mil y con la condición de asistir a alcohólicos anónimos. El 15 de enero de 2018, cuando regresó a los entrenamientos con Municipal, el volante dijo que la violencia era algo común, “cualquiera que tenga novia o esposa le puede pasar, aquí nadie nos salvamos”.
El mundo del fútbol respaldó a Pappa, su equipo, el Municipal, no se pronunció aduciendo que “era un tema privado”, y la Asociación de Futbolistas Profesionales adoptó la misma postura en redes sociales, incluso fue tomado como broma la violencia machista ejercida por el mediocampista.
Pappa se declaró culpable el 30 de junio de 2018 y fue obligado a disculparse públicamente con Kennedy. En ese momento, sentenciado a cinco años de prisión conmutables, así que con una multa de Q9 mil, se libró de ir a prisión.
“Cualquiera que tenga novia o esposa le puede pasar, aquí nadie nos salvamos” https://t.co/qZYG0BtQ5M pic.twitter.com/sBLxS7A2pB
— Antigua Sports (@antiguasports) January 16, 2018
5. Marco Pappa es denunciado por Andrea Aparicio
En enero del 2019 Marco Pappa fue denunciado nuevamente por violencia contra la mujer. En esta ocasión, la más sonada de todas, se viralizó un video de seguridad de un ascensor donde se observa al futbolista empujando y golpeando a su entonces pareja, Andrea Aparicio. Los hechos ocurrieron en diciembre del 2018, sólo seis meses más tarde de ser sentenciado a cinco años de prisión conmutables y en libertad tras pagar la multa. Aparicio, apoyada por su familia, lo denunció en enero de 2019. En febrero desistió de la denuncia a petición de Pappa, pero el MP siguió el proceso de oficio.
Pappa y Aparicio retomaron su relación en febrero, mientras él, libre de prisión, fue contratado en el Club Xelajú y ambos vivían en Quetzaltenango. Seis meses más tarde, en junio de 2019, el futbolista fue suspendido por presentarse en estado de ebriedad a un partido contra Guastatoya.
Pappa fue dado de baja en Xelajú y contratado por el Deportivo Mixco, del alcalde Neto Bran. El futbolista llegó como el refuerzo de lujo y causó polémica por su salario de Q100 mil mensuales, pero su paso por Mixco fue breve, salió de la institución en octubre, solo jugó 12 partidos y anotó un gol.
6. El juicio exprés
El 7 de enero del 2020, Marco Pappa aceptó por segunda ocasión ante un juez haber cometido el delito de violencia física contra la mujer para beneficiarse con un proceso rápido, esto ocurrió en un juzgado de Quetzaltenango, el juez lo benefició con un juicio exprés por aceptar los cargos por agredir a Aparicio en 2018.
Por segunda ocasión Pappa fue condenado y evitó purgar la pena de cárcel pagando Q9 mil. Pese a su reincidencia en casos de violencia contra mujeres, Pappa recibió la oportunidad de volver a jugar a Municipal, pero en julio del 2020 fue arrestado por escandalizar en la vía pública en estado de ebriedad en una zona residencial de la ciudad de Guatemala. En ese momento, el equipo anuló el contrato del futbolista, que no jugó ni un solo partido.
7. La tercera sentencia y la agresión en prisión
Apenas habían pasado seis meses de recibir su segunda sentencia, cuando Pappa fue denunciado de nuevo por Andrea Aparicio. Un video difundido en redes sociales muestra al futbolista alcoholizado insultando y golpeando a su pareja. En ese momento, Pappa huyó y fue declarado prófugo.
Andrea narró en una entrevista con la revista digital Ruda, que esa noche Pappa la golpeó en el estacionamiento de su apartamento, la ahorcó en repetidas ocasiones, le pegó un puñetazo en la nariz y finalmente la policía trasladó a ambos al Ministerio Público. Esta agresión provocó que Pappa fuera enviado a prisión con la declaración de Aparicio. El juzgado segundo de femicidio lo envió a prisión preventiva desde agosto del 2020.
El futbolista convenció a Andrea que lo visitara en una ocasión en Mariscal Zavala en marzo de 2021 a base de chantajes según consta en un comunicado publicado a nombre de Aparicio en redes sociales el 3 de junio de dicho año. Ella se negó a tener relaciones sexuales y una vez más Pappa se tiró sobre ella y la golpeó, Aparició aseguró que amenazó con matarla, según consta en la entrevista publicada por Ruda en enero del 2022.
Andrea Aparicio denunció el hecho y el 25 de junio de 2021 el juzgado de femicidio de turno ligó a proceso al futbolista. Sin embargo, el juzgado segundo de femicidio resolvió el 26 de noviembre cerrar el proceso en favor de Pappa. El criterio fue que el Ministerio Público se refiere al lugar donde ocurrieron los hechos como “toldo” y no como “celda”, es decir, un detalle en la redacción del planteamiento de la acusación fue motivo para cerrar el caso.
Sin embargo la Fiscalía de la Mujer apeló la decisión del juzgado argumentando que no se valoró la comisión del delito y solo se resolvió en base a un error de forma, en este caso, la descripción del lugar donde ocurrió el tercer ataque denunciado por Aparicio.
Pappa lleva poco más de dos años en prisión, a pesar de que fue condenado a cinco años de prisión y a pesar de que cuenta con un antecedente de tres sentencias por el mismo delito cometido contra dos de sus ex novias. Sin embargo, es cuestión de días para que la reducción de la pena cobre vigencia y él pueda recobrar su libertad a sus casi 35 años.
Más jugadores acusados de violencia contra la mujer
Marco Pappa es el caso más conocido por ser un futbolista mediático, pero no ha sido el único en Guatemala con delitos de violencia contra la mujer en su record. El caso más grave es el femicidio cometido por un futbolista en Guatemala es el de Emerson Marroquín, ex futbolista de equipos como Xelajú, quien fue detenido el 6 de noviembre del 2018 en Texas, Estados Unidos, acusado del asesinato de la poetisa y estudiante de arquitectura Gabriela Barrios. El juicio inició en julio del 2022.
A criterio de la abogada Stephanie Rodríguez, la reducción de penas aplicada para un acusado que ha sido sentenciado tres veces por el mismo delito muestra el mal funcionar del sistema.
“En Guatemala tenemos una ley contra el femicidio y otra contra la violencia sexual desde el 2009. Las bases jurídicas son muy buenas, el problema son los operadores de justicia y la corrupción. La violencia es el segundo delito más denunciado en todo el país, es preocupante que beneficien a un Marco Pappa que ha sido reincidente”, dijo la abogada.
En una Guatemala fueron asesinadas 376 mujeres entre enero y mayo de 2022 según datos del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM) y en 2022 fueron presentadas 41 mil denuncias de violencia contra la mujer en todas sus manifestaciones hasta junio según datos oficiales del Ministerio Público (MP).
El gremio de futbolistas evita realizar comentarios sobre la situación de Marco Pappa. Carlos Figueroa, director del Sindicato de Futbolistas Profesionales de Guatemala (Sifupgua), declaró que prefieren concentrarse en las condiciones laborales de los deportistas. “Sobre temas personales de cada jugador no tenemos opiniones que les puedan afectar, no opinamos sobre la vida privada, nuestro objetivo es velar por la dignificación laboral del futbolista”, dijo Figueroa.
El caso de Pappa ilustra la benevolencia del sistema judicial para con los agresores. Ejemplifica con exactitud cómo un hombre, a pesar de reincidir en la comisión de un delito hasta en tres ocasiones en un periodo menor de cinco años, a pesar de las imágenes explícitas de violencia, los videos y testimonios de sus víctimas, donde reconocen haber sido ahogadas, violadas, golpeadas, maltratadas sexual y piscológicamente; puede ser beneficiado con medidas sustitutivas, reducciones de pena bajo criterio de “buen comportamiento” y como un gremio deportivo (conformado por hombres), decide simplemente guardar silencio ante los abusos y gritar los goles.