El aumento de los diputados aún está en disputa. La Corte de Constitucionalidad podría obstaculizarlo. Algunos partidos, como Semilla, lo rechazan y aseguran que tratarán de revertirlo. Pero mientras esto sucede, los diputados ya han hecho una cosa: cobrar en febrero un salario base que multiplica casi por cuatro el recibido en enero y que aumenta en un 120% el costo de la planilla del Congreso.
Pocas medidas pueden ser más polémicas.
Los diputados, siempre tan criticados, reciben un aumento en su salario base. ¿Cómo lo logran? Votando ellos mismos a favor de la medida. ¿De cuánto es el incremento? De varias veces su salario base actual, algo con lo que la mayoría de trabajadores del sector público o privado no podrían ni soñar.
La decisión se tomó hace ya meses, en noviembre pasado, cuando los diputados aprobaron el presupuesto del Congreso para 2025.
Entonces decidieron que este año su salario debía equipararse al de los magistrados de apelaciones. El aumento se justificó en unas pocas líneas, sin entrar en detalles o mencionar cifras.
Pero teniendo en cuenta que los magistrados de apelaciones ganan, en total, unos Q66 mil (aunque esto varía según su antigüedad) y muchos diputados, alrededor de la mitad, pronto se intuyó lo que estaba sucediendo.
Los diputados querían aumentarse el sueldo de una manera considerable y discreta. Esto generó críticas y motivó recursos ante la Corte de Constitucionalidad que continúan.
Sin embargo, el aumento no se hizo efectivo hasta la semana pasada, cuando finalizó febrero y los legisladores recibieron su salario del mes.
Desde entonces, ha quedado claro lo que el aumento significa, en la práctica, el coste que tendrá. La información disponible en el Sistema de Contabilidad del Estado (Sicoin) consultada para esta nota permite entenderlo.
Finalmente, las cifras del aumento son mayores a las esperadas.
Los diputados han equiparado su salario base al de los magistrados de apelaciones. Esto significa que en vez de recibir Q9,550 de salario base, como sucedía hasta ahora, los diputados ahora cobran el salario base de los magistrados de apelaciones: Q46,700.
Es decir, los legisladores prácticamente han cuadruplicado su ingreso, un incremento de casi el 400%.
Pero hay que tener en cuenta que el salario base es solo una parte pequeña del sueldo final que reciben los legisladores. En realidad, la mayoría de su salario se compone de dietas y gastos de representación y este tipo de ingresos no han aumentado.
Por eso, el incremento aprobado por los diputados tendrá un impacto más reducido en el presupuesto.
Se va a traducir en aumento total de la planilla de alrededor del 120%. Si en enero de este año, pagar a los 160 diputados costó algo menos de Q5 millones, ahora costará casi Q11 millones mensuales, según información disponible en Sicoin.
Se trata de un incremento histórico y una medida especialmente difícil de justificar ante los ciudadanos.
La decisión, además, se suma a otras medidas impopulares tomadas recientemente por el Congreso como la subida generalizada a la pensiones de los jubilados del Estado; la reducción de impuestos para ganaderos o el aumento del presupuesto para obras en los Consejos de Desarrollo Departamental (Departamental).
Aunque aún no es seguro que se mantenga el aumento, acá te explicamos cómo sucedió, utilizando información de Sicoin.
¿Cuánto ganaban antes los diputados?
Cuánto y cómo cobran los diputados no es algo rápido de explicar. El salario de los legisladores tiene varios componentes. Y, además, se paga en diferentes momentos.
Por una parte está el salario base, los gastos de representación y las dietas por acudir al pleno. Estos tres componentes, los cobran los diputados a la vez, al final de cada mes.
Según la información publicada por el Congreso, hasta enero, todos los diputados recibían el mismo salario base: Q9,550 mensuales.
Este ingreso bajo lo compensaban con gastos de representación y dietas por acudir al pleno tan altas como el propio salario.
Sumando estos tres componentes, la mayoría diputados alcanzaban los Q29,150 mensuales. Y quienes integran la Junta Directiva cobraban más: entre Q34,150 y Q44,150.
Este pago de salario base, gastos de representación y dietas lo reciben los diputados al final del mes. Y hasta enero, suponía el desembolso de algo menos de Q4 millones mensuales.
El Congreso siempre paga a los diputados a través de cuatro bancos: Industrial (BI), Banrural, G&T Continental y Crédito Hipotecario Nacional (CHN).
Por eso, estos casi Q4 millones mensuales se distribuían a estos bancos.
El registro de Sicoin que se muestra a continuación, refleja el pago de final de mes que los diputados que cobran a través de BI recibieron de enero de 2025.
En total, suma algo más de Q1 millón.
En detalle, se pueden ver cómo el pago tiene tres componentes que se atribuyen a diferentes renglones del presupuesto (un código que utiliza el Estado para clasificar sus gastos).
Uno es el salario base (renglón o REN 011); otro las dietas (renglón 062) y por último los gastos de representación (renglón 063)
Pero el pago a los diputados no termina al final de cada mes.
Después, en los días siguientes, reciben otro componente del salario que corresponde a una serie de dietas adicionales a las ya cobradas.
Quienes integran la Junta Directiva reciben dietas por las sesiones en las que participaron en las semanas previas. También los jefes y subjefes de bloque. Y todo diputado que participe en reuniones de las comisiones legislativas también cobra estas dietas.
Esta parte del salario se paga de la misma manera: a través de los cuatro bancos, y, normalmente, durante la primera quincena del mes.
A continuación, se muestra un registro de Sicoin que refleja un desembolso al CHN por las dietas a diputados por participar en comisiones.
Como pueden ver, el pago se hizo el 12 de febrero de este año, pero corresponde al trabajo realizado en enero. Suma Q200 mil.
En total, estas dietas que se cobran en la primera quincena, representaban, un desembolso mensual de unos Q894 mil.
El Congreso no publica cómo se distribuyen exactamente por diputado estas dietas. Pero, si hacemos un promedio, sería de unos Q6 mil mensuales por legislador (si bien unos diputados reciben muchas más dietas que otros y cada mes la cifra puede variar).
Es decir, que hasta enero, la mayoría de diputados tenían un salario total mensual de unos Q29 mil.
Y los miembros de la Junta Directiva ganaban entre Q40 mil y Q60 mil.
Esto se traducía en un planilla que suponía el desembolso de unos Q4.8 millones todos los meses.
¿Cuánto ganan ahora los diputados?
Todo este sistema sigue igual. Solo que en vez de recibir Q9,950 de salario base al final de mes, ahora este componente del sueldo se multiplica casi por cuatro hasta alcanzar Q46,700.
Así quedó reflejado en el pago de las nóminas de febrero de los diputados. El renglón o REN 011 se cuadruplicó, mientras que las dietas (REN 062) y gastos representación (063) se mantuvieron prácticamente iguales.
Se puede ver en el registro de Sicoin que se muestra a continuación. El documento refleja el pago de final de mes que se hizo a los diputados que reciben su sueldo a través de BI.
En enero, este pago fue de algo más de Q1 millón. Ahora ha crecido hasta los Q2.5 millones.
Este incremento se explica por el aumento en el renglón 011, el salario base. En enero fue de Q350 mil y ahora se multiplicó hasta alcanzar los Q1.7 millones.
Esto significa que la mayoría de diputados recibió al final de febrero, Q61,300. Y los miembros de junta directiva entre Q71,300 y Q81,300.
Y aún faltaría que cobren las dietas de la primera quincena del mes. Es decir, unos Q6 mil adicionales.
Estos ingresos aún no se habían desembolsado al momento de esta publicación, según la información disponible en Sicoin.
Cuando se hagan efectivos estos pagos, en unos días, los diputados rasos habrán recibido unos Q65 mil por su trabajo en febrero. Mientras que los salarios en la junta directiva, estarán entre los Q76 mil y los Q87 mil.
De esta forma, el presidente del Congreso se convertirá en uno de los altos cargos mejor pagados del Estado.
Aún así, su salario será inferior al de, por ejemplo, de los magistrados titulares de la Corte de Constitucionalidad, que cobran más de Q100 mil mensuales.
¿Cuánto costará este aumento a los ciudadanos?
Básicamente, un 120% más que lo que costó pagar a los diputados hasta ahora.
En un mes sin bonos u otros complementos, como fue enero pasado, pagar a los diputados significó algo menos de Q5 millones. Ahora, representará casi Q11 millones mensuales.
Esto podría argumentarse que no es tanto.
El Congreso tiene un presupuesto vigente este año de más de Q1,400 millones (que también financian el Parlamento Centroamericano y la Oficina del Procurador de los Derechos Humanos).
Es decir, el Congreso gastará en 2025, todos los meses, unos Q122 millones. Y el salario de los diputados, aún con el aumento, no representará ni el 10% del presupuesto de la institución.
Pero este dato también pone de relieve otro hecho. Sí, este aumento del salario de los diputados es impopular, y convierte a los diputados guatemaltecos en los mejor pagados de la región, como ha publicado Plaza Pública.
Pero si el Congreso absorbe tantos fondos públicos no es solo por los salarios de los legisladores, si no por todo lo que les rodea, como las miles de personas a las que dan empleo y el alquiler de oficinas.
Según la información que publica el Congreso, en enero había 1240 trabajadores con plaza fija y 662 con plaza temporal. A estos hay que añadir, los que figuran como contratados por servicios profesionales. Estos eran 223 en diciembre del año pasado.
Es decir, por cada diputado, el Congreso tiene, al menos, unos 13 empleados.
