¿Por qué el MP está persiguiendo al superintendente de la SAT Marco Livio Díaz Reyes? Todo tiene que ver con los casos de fraude fiscal que ha estado revelando la SAT desde hace unos meses: B410 y Eureka.
Aquí te lo explicamos:
El jefe de la SAT ya había advertido esta semana que era investigado por el Ministerio Público (MP) debido a una denuncia presentada en su contra por personas señaladas de evadir impuestos en los últimos meses. El MP no quiso aclarar si esto era cierto o no. Pero hoy se confirmó: ¡el MP allanó las oficinas de la firma de contadores que Díaz Reyes creó con su hermano Julio César en zona 15!
Sin una CICIG en el país o un MP que persiga la corrupción, la SAT se convirtió en una de las pocas instituciones que enfrentan los delitos de cuello blanco en Guatemala, como la evasión fiscal a gran escala.
En agosto, Díaz Reyes presentó el mega caso de fraude llamado B410 y a finales de noviembre otro llamado Eureka, relacionado con el primero. En el caso B410, la SAT estima una pérdida de hasta Q800 millones en impuestos que el Estado dejó de cobrar. Es una de las mayores estructuras de fraude fiscal detectadas.
En B410 están implicados poderosos constructores de obra pública como Gustavo Alejos, Ramiro Mauricio López Camey y Alejandro Matheu. También se involucra a personas que usaron empresas fantasmas para desfalcar dinero del Estado durante el gobierno de Alejandro Giammattei.
B410 y Eureka expusieron prácticas que han existido por décadas, como la compraventa de sociedades anónimas y de facturas, actividades que facilitan el fraude fiscal y otros delitos.
También revelaron corrupción a gran escala durante los últimos dos gobiernos, especialmente bajo Giammattei.
Según la SAT, grandes constructores apenas pagaron Impuestos Sobre la Renta pese a ganar cientos de millones de quetzales en contratos públicos. Además, se apropiaron del IVA que el propio gobierno les pagó.
Pero eso no es todo: ¡algunas de estas empresas ni siquiera realizaron las obras contratadas! ¿Por qué lo sospecha la SAT? Estas empresas carecían de empleados, máquinas o insumos básicos.
El MP tiene el caso B410 desde agosto, pero no ha presentado resultados. En cambio, persigue a quien destapó el caso: el jefe de la SAT, Marco Livio Díaz Reyes.
Algunos contribuyentes señalados por la SAT mostraron voluntad de colaborar y aceptaron pagar impuestos adeudados. Otros, en cambio, se resistieron y presentaron amparos para evitar ser suspendidos como contribuyentes mientras eran investigados.
Algunos casos llegaron a la Corte de Constitucionalidad, que esta semana dio la razón a la SAT , respaldando a Díaz Reyes en su batalla contra los contribuyentes señalados.
Sin embargo, ahora el MP parece intervenir para favorecer a los empresarios investigados, quienes denunciaron a Díaz Reyes. Él sostiene que son denuncias espurias que buscan obstaculizar el trabajo de la SAT, pero el MP parece haberles dado credibilidad.
Durante los allanamientos, el titular de la FECI, Rafael Curruchiche indicó que la investigación contra el Superintendente de la SAT, Marco Silvio Díaz, no está relacionada al caso #B410 y que la firma de auditores vinculada a su hermano podría haber beneficiado a empresas que tenían hallazgos o multas con la SAT.
Luego de las diligencias de allanamiento, la SAT confirmó que Marco Livio Díaz tomó licencia por vacaciones. El intendente de Atención al Contribuyente, Armando Pokus, ha asumido como superintendente interino.