Nueve médicos y enfermeros del Ministerio de Salud se contagiaron y fallecieron en los últimos cuatro meses mientras cumplían con su deber de atender a enfermos de Covid-19. De momento, casi 700 salubristas se han contagiado de esta enfermedad ante la falta de respuesta de las autoridades a sus precarias condiciones laborales.
El 11 de julio, Guatemala vivió con dolor la noticia del fallecimiento del doctor Oscar Hernández Alonzo, de 45 años, y quien laboró como jefe de encamamiento del área de moderados de Hospital de Campaña de Parque de la Industria. Ese mismo día, apenas unas horas más tarde se conoció que había fallecido José Manuel Fuentes Gonzalez, quien trabajaba como enfermero del Hospital Nacional de Malacatán y fungía como jefe del área de Emergencia.
Unos días antes, el 5 de julio, se conoció del deceso del doctor Erwin Amílcar Enrique Carrillo, quien trabajaba como especialista de medicina interna en el Hospital Regional de Escuintla. Unas semanas antes murió Hugo Leonel de León, auxiliar de enfermería de sala de operaciones del Hospital Nacional de Malacatán, primer trabajador de salud que murió a causa de coronavirus.
Desde el inicio de la pandemia, el personal del sistema público de salud denunció falta de equipo de seguridad para atender a los contagiados de Covid-19. Estos gritos de auxilio se han escuchado durante días, semanas y meses: en la puerta del Hospital San Juan de Dios, del hospital Roosevelt o del hospital de Campaña del Parque de la Industria y, a la fecha, siguen vigentes.
El último reporte del Ministerio de Salud del 9 de julio contabiliza 645 trabajadores de salud contagiados y ocho fallecidos, entre médicos, enfermeros, técnicos, administrativos y otros. De los contagios, 19 son de los cinco hospitales temporales para atender casos de coronavirus y los restantes 626 son de los 46 hospitales a nivel nacional.
Del total del personal de salud contagiado, 189 son médicos, 259 son enfermeros, 58 son técnicos, 35 trabajan en administración y 121 más en otras áreas. Fuentes del Ministerio de Salud confirmaron que 63 médicos del Hospital San Juan de Dios han resultado contagiados de Covid-19, siendo el centro donde más contagios se han reportado. El Hospital Nacional de Malacatán lidera la lista de enfermeros contagiados con 28.
Los centros en donde ha fallecido personal de Salud son: hospital General San Juan de Dios (2), Hospital Nacional de El Progreso (1), Hospital Nacional de Malacatán (3), Hospital de Infectología y Rehabilitación (1), Hospital Nacional de Ortopedia (1) y el Hogar de Ancianos Fray Rodrigo de la Cruz (1).
Doctor Oscar Guillermo Hernández Alonzo, el último de diez salubristas fallecidos
Oscar Guillermo Hernández Alonzo, de 45 años, murió el pasado sábado 11 de julio en el Hospital Temporal COVID19 del Parque de la Industria, el mismo lugar en el trabajó desde que el gobierno solicitó doctores, doctoras y personal de salud especializado para atender a la pandemia. El doctor Hernández acudió a este llamado desde un inicio y fue designado como jefe del área de encamamiento de pacientes moderados. En las siguientes semanas, Hernández comenzó a denunciar, de forma pública y más tarde anónima, debido al hostigamiento de las autoridades, las condiciones de precariedad en las que trabajaban. El 11 de junio dejó de laborar en el hospital de campaña. A esa fecha, el Ministerio de Salud aún no le había pagado ninguno de los tres meses trabajados.
“…te llaman héroe y te dedican un libro negro con letras doradas; aquellos que nunca aparecen, aquellos que nunca están, aquella sin conciencia, aquellos a quienes nunca importamos. Un mural para una construcción que se cae a pedazos, una amenaza para aquellos que piensan y abren los ojos ante la indiferente corrupción, aquella que nos asfixia, aquella que nos lacera, la misma que de lejos nos ve enfermar, pero reaparece con descaro al verte morir para salvaguardar la apariencia, pensando que con eso se lavan la cara, pero llevan tu sangre en sus manos y no importa cuánto la restrieguen, las palabras serán las mismas: corrupción, indiferencia, abuso y mediocridad, por eso están, por eso brilla..”
Tras conocer su deceso, sus compañeros hicieron pública una carta en la que lo despidieron y señalaron deficiencias en el sistema público de salud que, según esta misiva, no protege a sus doctores, doctoras y personal de enfermería, quienes arriesgan su vida durante la pandemia.
“…Ya no te preocupes, ya no temas, nosotros cuidamos tus turnos. Acompaña a los tuyos, velos crecer y sonreír. Es momento de quienes se quedan es tiempo de quienes deciden luchar, como lo propusiste, como te empeñaste. Hoy te decimos adiós padre devoto, esposo amoroso, profesional en toda la palabra, humanista comprometido. ¡señores médicos! Un compañero ha caído en esta guerra de la indiferencia, en esta guerra en la que no creemos, aquella que no creamos, pero por el prójimo nos sacrificamos…”.
Durante la tarde del sábado, en las afueras del Parque de la Industria, familiares y colegas hicieron un homenaje a Oscar Guillermo y lo despidieron a la una de la mañana del domingo, hora a la que fue entregado su cuerpo a la familia, quienes lo enterraron sin la presencia de todos sus seres queridos.
El doctor Jorge Tejada, quien fue compañero de Hernández Alonzo, catalogó su muerte como un duro golpe para el personal que trabajó en el Hospital Temporal, e instó a sus colegas a seguir tomando las medidas de prevención que coordinaron entre ellos.
“Es un momento difícil para todos nosotros, podría ser cualquiera de nosotros los que podríamos estar ahí. Esto es un golpe duro para nosotros, yo lo siento mucho, de verdad. Yo los exhorto a ustedes a cuidarse a seguir con todas las medidas. Esta batalla sigue, y no sé cuándo vamos a parar y cuidémonos entre nosotros”, expuso con voz quebrada el doctor Tejada
Otro médico se refirió a Óscar Hernández como héroe, ya que, a pesar de denunciar las precariedades en equipo de seguridad para los doctores, enfermeros y otro personal del centro, continuó atendiendo a los pacientes. “Es complicado para nuestros compañeros y para la familia. Gracias héroe sin capa, por su buena actitud, por su buena vibra, por siempre sacar una sonrisa de nosotros y por luchar al lado de nosotros”.
Tras la muerte del médico, el Procurador de los Derechos Humanos, Jordán Rodas Andrade, señaló que el doctor Hernández Alonzo fue uno de los que denunció las precariedades que había en el Hospital Temporal del Parque de la Industria. En un mensaje, agradeció la labor de todo el personal de Salud que expone su vida al atender a las víctimas del virus.
“En reiteradas ocasiones el personal de salud ha dado la voz de alerta sobre urgencias y necesidades que deben ser atendidas por autoridades, el doctor Óscar Hernández Alonzo fue uno de ellos. Su muerte no puede quedar en el olvido, deben reivindicarse los derechos del personal (…). Mis condolencias y solidaridad con las familias y compañeros del personal de salud que ha fallecido. Agradezco la labor del personal de salud que presta sus servicios, ante la emergencia sanitaria por Covid-19”, expuso el PDH.
Baja ejecución presupuestario: Sin insumos para el personal de salud
El 14 de mayo, el diputado de Winaq, Aldo Dávila, y su equipo de trabajo, hicieron un recorrido en el Hospital Temporal del Parque de la Industria vistiendo un traje de seguridad para evitar contagiarse.
“A mí me gustaría que el equipo de protección que usted tiene, afuera de donde están los pacientes, contáramos nosotros con eso”, le dijo al diputado un médico que lo acompañó durante la visita, “Porque si usted lo pudo encontrar, nosotros los médicos lo deberíamos tener adentro. Nos gustaría tener ese nivel de protección. Si usted lo pudo adquirir, creo que usted puede hacer algo para los médicos lo tengamos”, dijo el doctor al congresista Dávila.
Esta anécdota es una muestra de la falta de protección con que cuenta el personal de salud. A finales de marzo fue aprobado por el Congreso una ampliación presupuestaria de Q1,694 millones para que el Ministerio de Salud atienda a las víctimas del virus. Pero durante casi tres meses la ejecución apenas fue del 3 por ciento. Esto fue el motivo para que diversos sectores pidieran la remoción del entonces ministro Hugo Monroy.
En una carta publicada el 20 de abril, el procurador de los Derechos Humanos, Jordán Rodas pidió la remoción Monroy denunciando que existía un “retraso inexplicable de compras de insumos, medicamentos y equipos para responder a los picos altos de la emergencia”, y que el “desabastecimiento de equipo de protección de personal ha derivado en casos de contagios de personal médico, enfermería y otros servicios”.
En la investigación Donaciones para salvar a un abandonado sistema de salud, publicada por No-Ficción, Lucrecia Hernández Mack, exministra de salud y diputada por el Movimiento Semilla, señaló que los Hospitales Temporales funcionaban con las donaciones que empresas privadas y organizaciones hicieron. Reiteró que no ejecutar el presupuesto asignado para combatir la emergencia pone en riesgo la salud de todo el personal médico, y puso como ejemplo las precariedades que había en Parque de la Industria.
“Tanto las autoridades del Ministerio de Salud, como las del hospital del Parque de la Industria, comentan que están sobreviviendo a puras donaciones. Esto significa que no todos los días tienen trajes; un día tienen batas de un tipo y otro día batas de otro, mascarillas de un tipo y otro día de otro tipo, porque han sido acciones de buenas personas, organizaciones, empresarios, etcétera, las que les han permitido dotarse de algunos insumos, pero esto no es sostenible en el tiempo”, expuso Hernández Mack.
Colegio de médicos: existen precariedades
El 22 de junio, el presidente del Colegio de Médicos y Cirujanos de Guatemala (Coldemegua), Jorge Luis Ranero, dijo que tras demandar la compra de equipo de protección en diferentes ocasiones, se reunieron con el vicepresidente Guillermo Castillo, quien se comprometió a solucionar el problema, pero a la fecha no ven resultados.
“El día 14 de mayo, una comisión de Junta directiva del Colegio tuvo presencia en el Hospital Temporal del parque de la industria, en donde los médicos y el personal de salud solicitaron una reunión con el vicepresidente de la República para expresarle las necesidades y precariedades en las que estaban trabajando. Y se llegó a un acuerdo de que él iba a coordinar las acciones para solucionar los problemas. Eso fue el 14 de mayo y, hoy por hoy, los colegas del Parque de la Industria siguen con los mismos problemas”, dijo Ranero.
En la conferencia, el presidente del Colegio de Médicos, Jorge Luis Ranero anunció que ante la falta de insumos de protección para el personal de salud en primera línea que atiende a los pacientes de Covid-19, se encontraban haciendo convocatoria para que empresas donen equipo de protección el cual sería distribuido en donde más se necesite.
“Haremos una convocatoria a empresas nacionales, a la industria farmacéutica, al sistema bancario del país y a algunas entidades de salud como centros de diagnóstico, para que nos colaboren con aportes de mascarillas, protectores faciales, alcohol y demás. Nosotros, como Colegio de Médicos, nos encargaremos de hacer llegar estas donaciones al personal de salud. Es importante que la sociedad se identifique con el personal de salud que está dando la cara en la primera línea combatiendo la pandemia”.
Del 22 de junio a la fecha, la situación no ha cambiado. El pasado domingo un grupo de enfermeras y enfermeros que están en el área del intensivo del Hospital Temporal del Parque de la Industria denunciaron que, desde el 18 de marzo, fecha en la que empezaron a trabajar en el hospital, no han recibido su salario y que han prestado dinero para comprar el equipo de seguridad para evitar contagiarse, porque el que les dio el Ministerio es de mala calidad.
“La mayoría entramos en marzo y no nos han pagado. Somos un grupo de 60 personas de enfermería y le han pagado al 40 por ciento aproximadamente. Muchos no dicen algo por temor a represalias porque hay personas que se han manifestado en Recursos Humanos sobre la falta de pagos y lo que hacen es despedirlos”, dijo la enfermera Nancy Salazar.
Adriana Castillo dijo que les han dado equipo de seguridad, pero que es de mala calidad porque colegas suyos se han contagiado, por lo que han optado por comprarlo de su dinero.
“Nos han dado equipo, pero de mal material. La mayoría de personal se ha contagiado y no sabemos por qué si nos dan equipo de protección. Por eso mismo es que mejor decidimos comprar nuestro equipo. Yo de mi equipo gasté como Q1 mil. Tenemos que prestar de nuestras familias para comprar nuestro equipo. Los lentes ya se han quebrado, las caretas ya se han deteriorado”.
Salud: hay personal que no cumple protocolos
A través del departamento de comunicación del Ministerio de Salud se pidió una postura por los señalamientos que hace el personal sobre el abastecimiento de equipo de seguridad, a lo que respondieron con un mensaje del Viceministro de Hospitales, Francisco José Coma. En este mensaje, el viceminsitro indica que si existen contagios en el personal es porque no se cumplen los protocolos, descartando que sea por falta de insumos.
“Se brindan todos los equipos de protección personal y la inducción a través de los protocolos. Lamentablemente hay personal que también se contagia afuera y otros no cumplen con los protocolos establecidos. Quien está en contacto con pacientes COVID tiene todo su equipo de protección personal, y si hay un manejo adecuado de los casos no deberían contagiarse”, dijo Coma.
En la cadena nacional del pasado domingo 12 de julio, el presidente Alejandro Giammattei no se recordó de los médicos, enfermeros y técnicos que se han contagiado y fallecido de Covid-19. Ni del doctor Hernández o el enfermero José Manuel Fuentes, fallecidos ambos el día anterior. En su discurso, Giammattei se limitó a defenderse de los señalamientos en su contra y a desmintir noticias falsas que circularon durante la semana.
Caso contrario, la Asociación Guatemalteca de Enfermedades Infecciosas (AGEI) y el Colegio de Farmacéuticos y Químicos de Guatemala (Cofaqui) se solidarizaron con las familias del personal de salud fallecido y exigieron que se garantice el abastecimiento de equipo de protección personal para los trabajadores de salud que están en la primera línea de atención.
El Colegio de Farmacéuticos y Químicos de Guatemala pidió al Gobierno que se otorgue un seguro de vida a los trabajadores de salud que atienden los casos de coronavirus, para que las familias de los fallecidos no atraviesen problemas económicos como lo ocurrido con los diez médicos y enfermeros que perdieron la vida.
Las cifras de personal médico reportadas por el Ministerio tampoco cuadran
Por ya no trabajar en el Ministerio de Salud desde el 11 de junio, las autoridades de esta cartera no incluyeron en su reporte de decesos al doctor Oscar Guillermo Hernández Alonzo, quien falleció del virus el pasado sábado.
Al igual que con las cifras de contagios y las cifras de pruebas, existen dudas sobre el conteo del Ministerio de Salud en cuanto a su personal contagiado, debido a la falta de concordancia entre los datos presentados.
Esto hace que se desconozca el número de médicos, enfermeros y técnicos contagiados y fallecidos por coronavirus, ya que las cifras del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) y la Comisión Presidencial de Atención a la Emergencia Covid-19 (Coprecovid) no coinciden.
Así, mientras el Ministerio de Salud informaba el 9 de julio sobre 640 contagios; el cuarto informe de la Comisión Presidencial de Atención a la Emergencia Covid-19, enviado al Congreso el 7 de julio señala que, desde el inicio de la epidemia, 687 trabajadores de salud han sido contagiados y nueve han sido reportados como fallecidos. El documento señala que la mayoría de los casos han ocurrido en el Departamento de Guatemala en donde se encuentra la mayor intensidad de contagio actualmente.
Es decir, las cifras de COPRECOVID muestran 47 contagios más entre el personal que trabaja para el Ministerio de Salud que las cifras reportadas por esta institución.
Del 9 al 11 de julio, el Ministerio de Salud registró un fallecido más por lo que su suma llega a nueve. La víctima fue José Manuel Fuentes Gonzalez, quien trabajaba como enfermero del Hospital de Malacatán.
Bajas tasa de contagios entre personal sanitario en comparación con otros países, alta tasa de mortalidad.
Para el 12 de julio, el Ministerio de Salud registra 29,920 casos de Covid-19 y si se toma la cantidad del personal de salud contagiado que reportó la Coprecovid, representan el 2.29 por ciento del total de casos. Esta es una cifra baja en comparación a otros países, pero que no deja de ser alarmante, porque si no se dota de insumos al personal, la cantidad de casos y decesos podría aumentar.
En España, el Ministerio de Sanidad reportó hasta el 9 de julio, 52,643 casos de contagio en el personal de salud y 65 muertes. Los contagios en el personal representan el 22 por ciento del total casos en ese país que a la fecha suman 253,908 contagios.
Un informe presentado este lunes por Amnistía Internacional denuncia que más de 3 mil trabajadores de la salud han muerto por Covid-19 en todo el mundo, cifra que podría ser un poco más alta ya porque no existe ningún registro global.
El documento revela que los países con el mayor número de muertes de trabajadores de la salud hasta el momento son: Estados Unidos (507), Rusia (545), Reino Unido (540, incluidos 262 trabajadores de asistencia social), Brasil (351), México (248), Italia (188), Egipto (111), Irán (91) y Ecuador (82).
Sin embargo, si comparamos el porcentaje de personal médico fallecido en comparación con el personal contagiado, Guatemala supone 10 veces más de mortalidad entre el personal médico que en España.
Si se hace una relación del personal médico contagiado con el personal médico fallecido, en España esa cifra representa el 0.12 por ciento. En el caso de Guatemala ese porcentaje es más alto con un 1.45 por ciento.
Muertes fuera del sistema público
Pero también se han registrado muertes en médicos que no forman parte del sistema de salud público, uno de ellos fue Luis Eduardo Hernández Polanco, quien fungió como director del Hospital San Juan de Dios años atrás y ahora era doctor del equipo de futbol Deportivo Siquinalá. Otro fallecido es el doctor Oziel Enrique Alvarado López falleció, quien tenía su clínica en la Avenida Bolívar, zona 8 de la capital.
Desde que se registró el primer caso de coronavirus en Guatemala, el Colegio de Médicos y Cirujanos registra 44 médicos fallecido, pero únicamente se ha confirmado que siete de esas muertes fue por Covid-19. La cifra podría aumentar cuando se haga una revisión.
Sobre las muertes y contagios de médicos, enfermeros y personal técnico que está en primera línea, el doctor Jorge Luis Ranero, presidente del Colegio de Médicos y Cirujanos dijo que ellos los apoyarán con la dotación de recursos que continúan recabando a través de campañas y que deben redoblar sus medidas de seguridad para evitar contagiarse.
Así, mientras el personal de salud que trabaja en primera linea sigue arriesgando su vida sin importar las precarias condiciones en las que atienden a los pacientes, y reclama, a través de todas las vías posibles, que el Estado cumpla con sus demandas, hasta la fecha las autoridades de Gobierno siguen haciendo caso omiso a sus peticiones. A día 17 de julio de 2020, Guatemala contabiliza 26,726 casos activos de COVID-19 y 1404 fallecidos y fallecidas.
*De parte de No-Ficcion queremos enviar un mensaje de solidaridad, apoyo y cariño, a todas las personas que han perdido a un ser querido a causa de la COVID-19.