El presupuesto del Estado para 2025 está marcado por un hecho: en general, este año, el gobierno va a poder gastar más. Y en algunas áreas en concreto va a poder gastar mucho más que sus antecesores. ¿En qué obras o políticas concretas se traducirá este aumento del gasto público? Nos sumergimos en los Q148 mil millones del presupuesto vigente para contarte 11 prioridades que marcarán este segundo año del gobierno de Semilla.
El presupuesto del Estado para este año es el más elevado de la historia del país.
La frase suele repetirse, pero, en realidad, no revela algo extraordinario.
Normalmente, el presupuesto que aprueba el Congreso para financiar el funcionamiento del Estado aumenta cada año. Y por eso, cada presupuesto suele ser el más alto aprobado hasta ese momento.
Este año, en el que se aprobó un gasto máximo de Q148 mil millones, esto volvió a suceder. Pero con un matiz. El presupuesto de 2025 sí creció con respecto al del año anterior más de lo que ha sido habitual en el país.
El incremento autorizado en 2025 es el cuarto mayor de las últimas dos décadas, según datos del Centro de Investigaciones Económicas (CIEN).
Y de acuerdo a los cálculos ofrecidos por el Ministerio de Finanzas, si todo el presupuesto llega a ejecutarse, los Q148 mil millones, esto implicaría que, por primera vez, el gasto público representaría más de un 15% del tamaño de la economía nacional en su conjunto, el llamado Producto Interno Bruto (PIB).
En contraste, el gasto aprobado en 2024, representó menos de un 13% del PIB.
El Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI) considera que este incremento de alrededor de 2% del PIB, inaugura “una política expansiva del gasto” que revierte la tendencia a la estabilidad de los últimos años.
Esto, de hecho, ya ha generado el rechazo del sector privado organizado, que teme que se dispare el endeudamiento y ha actuado contra el presupuesto.
¿Pero qué significa todo esto para los ciudadanos?
Que el gobierno de Bernardo Arévalo podrá gastar más que sus antecesores en proveer servicios públicos.
Además, teniendo en cuenta que el presupuesto de 2024 fue heredado de la administración anterior, este año, por primera vez, el gobierno va a disponer de un presupuesto elaborado según sus propias prioridades.
El Estado se asemeja a un enorme buque que se mueve por inercia y cuyo rumbo no es sencillo cambiar.
Entre las decenas de miles de millones de quetzales del gasto público, hay partidas que tienen que asignarse por ley a ciertas instituciones. Es el caso, por ejemplo, de las municipalidades.
También hay desembolsos que simplemente deben hacerse, como pagar salarios, pensiones, facturas o cumplir deudas.
Además, aprobar un presupuesto suele implicar negociaciones en las que el gobierno cede a presiones de los diputados y otros actores políticos.
Todo esto limita el margen del que disponen los presidentes para hacer lo que les gustaría con el dinero público.
Pero, al mismo tiempo, cada presupuesto sí refleja las ideas y los métodos de cada gobierno.
A continuación: 11 prioridades que retratan a un gobierno socialdemócrata, diferente a otros, pero también sometido a las mismas presiones y límites que padecieron sus antecesores.
Los datos para esta nota proceden del presupuesto aprobado por el Congreso este año y el Sistema de Contabilidad del Estado (Sicoin).
1. Comunicaciones: al menos Q689 millones para el Anillo Regional
Uno de los legados principales del gobierno de Alejandro Giammattei fue adjudicar cinco grandes contratos por más de Q3,900 millones para avanzar en la construcción del llamado Anillo Regional. Este costoso proyecto consiste en construir una red de carreteras de cuatro carriles que permitan circunvalar el área metropolitana. Sería un periférico, como el que ahora atraviesa partes de la capital, pero este sí completo y a escala regional, conectando Guatemala, Chimaltenango, Sacatepéquez, Escuintla, Santa Rosa, Jutiapa, Jalapa y El Progreso.
El gobierno pasado adjudicó los contratos en una serie de concursos públicos criticados por la escasa competencia que hubo en ellos y porque los ganadores fueron empresarios cuestionados.
Sin embargo, Giammattei no pudo avanzar mucho en la construcción de las obras, algo que Arévalo sí tiene previsto hacer este año.
En el listado de obras aprobadas para 2025 se han destinado Q689 millones para construir dos de los tramos del Anillo. Uno al norte, en El Progreso, corre a cargo de Constructora San Francisco, una empresa del clan de los Córdova, de Alta Verapaz. Y otro al sur, en Escuintla, es ejecutado por Ciansa, una empresa vinculada al financista de campañas políticas condenado por corrupción, Gustavo Alejos.
Ninguna otra obra tiene mayor presupuesto asignado este año que el Anillo Regional.
Además, el gasto podría incrementarse y sobrepasar los Q1 mil millones. En el decreto del presupuesto aprobado por el Congreso, los diputados añadieron otros Q400 millones para financiar otros dos tramos, además de los previstos inicialmente por el gobierno.
Uno de estos tramos es el que ejecuta Aspetro, una constructora cuyos dueños, los López Camey, han sido sancionados por Estados Unidos por corrupción. El otro tramo lo construye Tracser, una de las contratistas más favorecidas por Giammattei.
2. Comunicaciones: Q364 millones para pasos a desnivel
Otro de los proyectos de infraestructura heredados del gobierno anterior a los que la administración de Arévalo dará continuidad este año es el programa de construcción de pasos a desnivel. Este tipo de obras contribuye a aumentar la fluidez del tráfico, uno de los grandes problemas del país.
En el presupuesto de 2025 está previsto financiar al menos seis grandes pasos a desnivel. Todos ellos fueron adjudicados en la administración anterior. Juntos suman una inversión de casi Q364 millones.
Las obras se centran, sobre todo, en el área sur de la capital: en la avenida Petapa y 53 calle, en la calzada Aguilar Batres y 46 calle; así como en los kilómetros 26 y 31 de la ruta al Pacífico.
Sin embargo, también está previsto invertir en la construcción de un paso a desnivel a la entrada de Mazatenango y otro en el acceso a Quetzaltenango, donde se encuentra el Organismo Judicial. La obra de este último ya tiene avances.
3. Programas sociales: Q1,500 millones en pensiones para mayores.
Desde que comenzó a funcionar en 2007, el Programa de Aporte Económico al Adulto Mayor (PAM), que ejecuta el Ministerio de Trabajo, es una de las pocas políticas públicas enfocadas a personas ancianas sin ingresos.
Este es un colectivo especialmente vulnerable. En áreas urbanas alrededor del 55% de los mayores de 65 años vive en pobreza, según Segeplan.
Sin embargo, desde su creación, el PAM nunca fue muy prioritario.
Su presupuesto casi siempre estuvo estancado en unos Q500 millones anuales. Y la pensión mensual que otorga solo se incrementó Q100 en 16 años.
Originalmente, la pensión era de Q400 mensuales y ahora asciende a Q500.
El actual gobierno quiso cambiar esta situación. Ya en 2024 el gasto en el PAM se incrementó hasta superar los Q1 mil millones. Y en el presupuesto de este año, estaba previsto doblar esta cifra hasta los Q2 mil millones, un incremento sin precedentes.
Sin embargo, al final, los diputados decidieron recortar en Q500 millones la asignación.
Estos fondos fueron reencauzados hacia obras en los Consejos de Desarrollo Departamental, tradicionalmente una carta de negociación con los diputados distritales en el Congreso.
Este recorte deja al PAM este año con un presupuesto vigente de unos Q1,500 millones. Aún así, esta es una cifra histórica, que permite crecer al programa más que nunca.
El propósito del gobierno es que para 2028, uno de cada tres adultos mayores en situación de pobreza reciba una pensión.
4. Programas sociales: casi Q1,900 millones en transferencias condicionadas.
Con las llamadas Transferencias Monetarias Condicionadas (TMC) que entrega a las personas más pobres el Ministerio de Desarrollo, sucede algo similar que con el PAM.
Después de años de estancamiento, este gobierno quiso otorgarles más importancia y lo ha hecho. Sin embargo, en la práctica, también se ha visto limitado por decisiones tomadas por una mayoría de diputados en el Congreso.
Las TMC son pagos mensuales a personas vulnerables a cambio de que cumplan con un requisito como acudir a un centro de salud o mantener escolarizados a sus hijos.
Esta política nació durante la administración de Álvaro Colom (2008-2012). Y estaba destinada a ser la herramienta principal para combatir la pobreza, como ha sucedido en otros países de la región.
Sin embargo, tras el impulso inicial, el programa fue perdiendo fuerza. Durante años su presupuesto rondó los Q400 o Q500 millones.
En el primer año de Arévalo, los fondos asignados a las TMC se multiplicaron y alcanzaron los Q1,200 millones.
Y para 2025, se decidió incrementar el gasto todavía más hasta los casi Q1,900 millones.
Pero uno de los motivos por los que se aprobó este incremento en el Congreso fue que una parte considerable de este dinero beneficiará a veteranos militares.
Estos reciben un pago a cambio de reforestar gracias a una ley aprobada en 2022. Esta norma cuenta con el respaldo de las principales bancadas en el Congreso.
De los Q1,900 millones, algo más de Q1 mil millones están presupuestados para los veteranos. Mientras que los alrededor de Q900 millones restantes, serán para personas vulnerables.
Aun así, esto representa un incremento considerable para las TMC con respecto a años anteriores.
5. Salud: Avanzar en 15 hospitales y Q3,300 millones en medicinas, insumos y equipos
Durante la pandemia comenzó un periodo de incremento en el gasto del Ministerio de Salud que se ha sostenido. En 2021, por primera vez, el gasto de esta cartera sobrepasó los Q10 mil millones. Y si se cumple con lo presupuestado para 2025, el gasto este año llegaría a cerca de los Q15 mil millones.
Esto es aún poco, teniendo en cuenta el rezago histórico que arrastra el país en este campo.
Pero sí permitirá hacer algo que antes había sido complicado: aumentar el gasto en medicamentos y otros insumos médicos al mismo tiempo que se invierte en infraestructura.
En 2025, el Ministerio de Salud pretende hacer ambas cosas.
Tiene presupuestados Q352 millones para avanzar en las obras del mejoramiento de 15 hospitales.
Las inversiones más importantes se harán en el hospital de Sololá (Q113 millones) y en el de Chiquimula (casi Q46 millones). Ambos contratos fueron adjudicados en 2022 y su ejecución ha avanzado lentamente.
Pero junto a estas obras, el Ministerio de Salud también tiene previsto un incremento sustancial en el gasto en insumos médicos.
La falta de medicamentos o exámenes ha sido una queja recurrente de los usuarios del sistema. Esto ocurre por la falta de presupuesto.
En 2023, por ejemplo, la cartera de Salud gastó en medicamentos y otros suministros, unos Q1,400 millones.
Para este año, en cambio, está previsto más que duplicar esta cifra. El presupuesto de 2025 en estos renglones asciende a algo más de Q3,300 millones.
Además, la ley del presupuesto ordena que para gastar estos fondos se privilegie el uso del nuevo sistema de subastas inversas que gestiona UNOPS, una agencia de Naciones Unidas. Este mecanismo externaliza las compras fuera de la cartera de salud. Además, fuerza a los proveedores a compartir más entre sí. Esto puede prevenir la corrupción y lograr que el Estado obtenga mejores precios.
6. Educación: Q710 millones para seguir remozando escuelas
El Ministerio de Educación (Mineduc) es, con diferencia, la institución pública que mayor presupuesto tiene. Este año alcanza los Q25,600 millones.
Sin embargo, el Mineduc no suele disponer de mucho margen para utilizar sus fondos para emprender nuevos proyectos
Gran parte de su presupuesto tiene destino fijo. Debe emplearse sí o sí en pagar los salarios de los docentes. O en cumplir programas creados por ley, como el de la refacción escolar.
El actual gobierno, sin embargo, está priorizando algo que hasta ahora no había recibido mucha atención: mejorar las escuelas públicas que ya existen a través de pequeñas obras.
Según los datos del Mineduc, miles de escuelas del país carecen de lo más básico.
Casi el 15% no dispone de agua corriente; un 24% no tiene electricidad y la mitad requiere techos y baños nuevos.
Para este tipo de proyectos nació el programa de remozamientos. El año pasado se gastaron casi Q860 millones en este tipo de reparaciones. Y este año, aunque el presupuesto para este rubro se ha reducido a Q710 millones, seguirá siendo mucho más alto de lo habitual.
Históricamente, los remozamientos tenían un presupuesto de menos de Q250 millones anuales.
7. El Estado ha comenzado a pensar en el medioambiente. El MARN dobla su presupuesto.
El de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), fue uno de los últimos ministerios en ser creados. Nació en el gobierno de Alfonso Portillo (2000-2004) y desde entonces, su presupuesto se ha mantenido siempre entre los más bajos de todos los ministerios.
En 2024, el MARN dispuso de casi Q187 millones, de los que gastó apenas Q160 millones.
Para este año, sin embargo, está prevista una expansión sin precedentes del presupuesto de la cartera. Tiene asignados Q357 millones, un incremento de casi el 100% con respecto a lo aprobado en 2024. Es el ministerio que, en proporción, más crecerá este año.
Esto permitirá principalmente una cosa: fortalecer el proceso de emisión de las licencias ambientales.
Estas son autorizaciones con las que es necesario contar cuando una empresa o persona realiza una actividad económica que impacta en el medio ambiente.
En el último año de la administración de Giammattei, en 2023, el MARN destinó solo unos Q25 millones a esta actividad.
Esto limitaba su capacidad para analizar con profundidad los Estudios de Impacto Ambiental y verificar su cumplimiento.
Ahora, el presupuesto para este fin alcanza los Q90 millones.
Ya el año pasado, el MARN dio muestras que pretende fortalecer el proceso de emisión de licencias ambientales. En diciembre, las autoridades suspendieron la actividad y multaron a la minera Mayaniquel por incumplir compromisos ambientales en su actividad en Panzós, Alta Verapaz.
Además, el incremento de su presupuesto permitirá al MARN aumentar su personal en planilla un 14%. Está previsto que la cartera cree 93 nuevos puestos este año.
8. Cambio Climático: 452 millones para proteger bosques
El énfasis en la protección ambiental, también se refleja en los aumentos de presupuesto que han recibido los programas relacionados con evitar la pérdida de bosques.
Al igual que otros países, Guatemala se ha comprometido a nivel internacional a reducir sus emisiones de carbono y así reducir su contribución al cambio climático.
Para los últimos gobiernos esto ha significado una cosa principalmente: tratar de reducir la deforestación.
Uno de los objetivos principales de la presidencia de Arévalo, de hecho, es recuperar los niveles de cobertura forestal que había en 2020 y evitar que se reduzcan.
Para lograr esto, todas las instituciones involucradas han recibido en 2025 incrementos sustanciales de su presupuesto.
El Instituto Nacional de Bosques (INAB) tiene este año una asignación un 30% superior a la vigente en 2024. Mientras que el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap) se ha beneficiado de un incremento del 38% con respecto al año pasado.
Ambas instituciones, juntas, contarán con un total de Q452 millones.
Además, el gobierno incluyó en el presupuesto presentado al Congreso una partida de Q382 millones para iniciar el llamado Programa de Reducción de Emisiones (PRE).
Este es un proyecto de bonos de carbono financiado por el Banco Mundial para pagar a personas o comunidades a cambio de los servicios ambientales que prestan como la conservación y renovación de los bosques. Inicialmente, los diputados sometieron este proyecto a un recorte sustancial, sin embargo, después fue ratificado en la ampliación aprobada en febrero. El PRE ya fue presentado oficialmente.
9. Q451 millones para más actividad física
Además de poner el foco en el medioambiente, el presupuesto de este año también hace énfasis en otro asunto que tradicionalmente no ha recibido mucha atención: el deporte no profesional.
El Ministerio de Cultura y Deportes (Micude), de hecho, es uno de los ministerios más beneficiados con el incremento del presupuesto este año.
Su asignación creció un 23% con respecto a 2024 y asciende a Q976 millones. Y una parte importante de este incremento está concentrado en todo lo relacionado con la promoción del deporte no federado.
Este programa acapara prácticamente la mitad de los fondos de la cartera: Q451 millones.
Administraciones anteriores utilizaron estos fondos, sobre todo, para construir canchas o repartir ropa deportiva.
Este gobierno hará ambas cosas. Pero también tiene previsto organizar actividades que atraigan a la población hacia los centros deportivos que ya existen, como el Campo de Marte o el Parque Erick Barrondo, ambos en la capital.
En 2022, solo un 3,5% de la población adulta practicaba deporte, según datos del Micude.
Uno de los objetivos del gobierno es ir aumentando poco a poco este porcentaje organizando actividades deportivas.
Para lograrlo, en parte, la cartera recurrirá a incrementar su personal en planilla en un 46%.
El Micude tiene previsto contratar a casi 1,700 personas este año.
Otro programa relacionado con este, lo ejecutará el Mineduc. Esta cartera tiene asignados este año importantes incrementos en todo lo relacionado con la materia de educación física.
También está previsto que estos fondos se usen para contratar personal. Después de años sin crear plazas para maestros de educación física, el Mineduc espera contratar 700 este año.
10. Q110 millones para proyectos de riego.
El Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) no es una de las entidades más favorecidas en el presupuesto de 2025.
El gobierno pretendía mantener la cartera con unos Q2,500 millones este año; una suma similar a la que dispuso la cartera en 2024.
Sin embargo, los diputados recortaron fondos y dejaron al MAGA este año con menos recursos que el pasado. Al final, la cartera tiene asignados algo menos de Q2,200 millones.
Sin embargo, esto no ha evitado que el MAGA haya mantenido algunos de sus planes originales para este año. Entre ellos destaca uno: financiar varios grandes proyectos de irrigación.
La falta de riego (tubos, bombas hidráulicas, aspersores, embalses) es un problema para muchos campesinos del país. Dificulta el desarrollo de una agricultura más productiva, que genere más ingresos.
En muchos lugares, de occidente sobre todo, el agua no escasea y sería factible producir frutas y hortalizas para el mercado todo el año.
Sin embargo, en las últimas décadas la construcción de este tipo de infraestructura ha tenido escasa financiación estatal.
Desde el año 2020, en promedio, el MAGA destinó alrededor de Q36 millones anuales para proyectos de irrigación.
Este año, sin embargo, esta cifra se triplicará y alcanzará Q110 millones. La gran mayoría de estos fondos, Q91 millones, se invertirán en Nentón, Malacatancito y Jacaltenango, tres municipios de Huehuetenango.
El proyecto al que se destinarán más recursos, Q48,5 millones, es el de Jacaltenango. Este fue adjudicado en 2022 por un total de Q87 millones y debió terminarse el año pasado. Sin embargo, la falta de fondos lo impidió. Con el dinero asignado este año, en teoría, la obra podrá terminarse.
Este sistema riego permitirá a unos 2 mil agricultores de un área de Jacaltenango conocida como La Franja regar sus tierras con agua procedente del río Azul.
11. Dos megaobras que podrían avanzar: la nueva cárcel de Masagua y el metro.
El presupuesto de 2025 también prevé que se pueda avanzar en dos grandes proyectos que han estado estancados por años.
Uno de ellos es la construcción de la nueva cárcel de Masagua, en Escuintla.
Esta será una prisión para que cumplan condena unos 3 mil reos. Las nuevas instalaciones permitirán separar por perfiles a los internos y ofrecerles actividades de reinserción, algo que hasta el momento ha sido complicado en las viejas prisiones.
El contrato, de casi Q670 millones, ya fue adjudicado en 2022. Además, la obra cuenta con financiación internacional, del BCIE.
Sin embargo, hasta el momento, la construcción del centro apenas ha progresado, según datos de Segeplan.
Este año, el Congreso aprobó una partida de Q250 millones para el proyecto, lo que permitiría un avance significativo. Pero dado que en 2023 y 2024 el penal de Masagua ya obtuvo asignaciones millonarias, no está claro si esta vez sí arrancará.
En una situación aún menos avanzada si cabe se encuentra el proyecto del tren ligero para la capital, el llamado Metro Riel.
La idea se lleva años discutiendo y aún no está claro cómo se ejecutaría exactamente. Además, la municipalidad de la Ciudad de Guatemala parece estar dando prioridad al Aerometro, la construcción de un teleférico.
Sin embargo, la creación de un tren que mejore la calidad del transporte público capitalino es una de las promesas del presidente Arévalo. Y para avanzar en ello, en el presupuesto de 2025 hay Q1,200 millones reservados para un metro que aún parece lejano.
