Luis Xol nunca pudo ser alcalde de Livingston. Ganó las elecciones de 2019 con UCN, pero lo asesinaron dos meses después. Hoy su hermano menor, Enrique, ha ganado con Cambio. Esta es la historia de dos hermanos, un asesinato sin autores y un legado político.
Texto: Lenad Gamboa y Juan Diego Godoy / Edición : Juan Diego Godoy y Carolina Gamazo
¡Bam!, ¡bam!, ¡bam! El ruido del motor de la lancha en la que iba la víctima se desvaneció con su vida. “Sé que fueron al menos tres disparos”, dice una persona cercana a la víctima, que prefiere no ser identificada.
El 29 de agosto de 2019 Luis Xol Rax fue asesinado en la aldea Cayo Quemado, ubicada a las orillas de “El Golfete”, en Livingston, Izabal. En el altercado también murió de su hermana, Olga Xol, quien estaba en esa misma lancha. Este no fue un asesinato más en una zona ya de por sí conflictiva. Luis Xol acaba de ganar la alcaldía de Livingston.
“Fue un golpe pesado para la familia, amigos y compañeros cercanos políticamente. Sobre todo porque no se hizo una investigación formal y quedó como un crimen más”, explica Adolfo González, asesor político y amigo de la familia Xol.
El alcalde que nunca pudo ser
Luis Xol era un personaje conocido en la política municipal. Para las elecciones de 2019, llevaba ya tres contiendas buscando ser alcalde. En 2011, se estrenó como candidato con el partido CREO. No le fue mal para ser su primera contienda: obtuvo el tercer lugar, con un total de 2,066 votos. Para la siguiente elección, en 2015, lo intentó también con CREO. Escaló al segundo lugar con 5,582 votos. Y a la tercera fue la vencida, el candidato se postuló con el partido Unión del Cambio Nacional (UCN), sumó 8,862 votos y ganó la alcaldía.
En 2019, el mismo año que Xol ganó las elecciones municipales, inició la debacle de UCN. Mario Estrada, el líder y candidato presidencial del partido, fue arrestado en Miami en abril de 2019. La justicia estadounidense lo acusó de haber solicitado dinero al cártel de Sinaloa (México) para su campaña. Y, en febrero de 2020, un tribunal de EEUU condenó a Estrada a 15 años de prisión.
Daniel Pinto, el sucesor de Xol
Tras el asesinato de Xol, Daniel Esau Pinto Peña asumió la alcaldía de Livingston. La inesperada gestión de Pinto Peña fue complicada. “Es difícil gobernar si no has sido electo directamente”, sugiere un trabajador de la alcaldía de Livingston que también ha pedido el anonimato.
Pinto Peña ejecutó varias propuestas del plan de Xol, como el mejoramiento del servicio del agua potable a comunidades y la ampliación de calles del municipio. “Pero no se pudo hacer mucho más. Pinto Peña no es Luis Xol y eso la gente lo sabe muy bien. Se lo cobró con apatía y bloqueos internos”, indica el trabajador municipal.
Cuando gana la nostalgia
Se acercaba el 2023. Con una gestión regular de Pinto Peña, comenzaron a aflorar nuevas propuestas y candidatos. ¿Quién buscaría la alcaldía? ¿Valía la pena arriesgar la vida por Livingston? En casa de los Xol se hacían otras preguntas: ¿Cómo reivindicar la vida de un hermano? ¿Cómo hacer justicia a un crimen impune? Enrique Xol encontró la respuesta en una solución: postularse como candidato a la alcaldía de Livingston para las elecciones de 2023.
El hermano de Luis, como le llaman algunos habitantes, lanzó su candidatura con un partido igual de controvertido. Se postuló con Cambio, una agrupación fundada por los hijos del ex candidato Manuel Baldizón, acusado y condenado a cuatro años de prisión por el delito de lavado de dinero en Estados Unidos. Un caso similar en sus formas al de Mario Estrada; ambos estaban vinculados con el narcotráfico, según los tribunales estadounidenses.
Para estas elecciones, Pinto Peña buscó la reelección con el partido Cabal, pero el principal rival de Enrique Xol fue Federico Flores, candidato del partido Vamos, el partido oficialista.
Enrique Xol gana la alcaldía
El 25 de junio, con una campaña basada en la consternación por el asesinato de Luis Xol, su hermano ganó la alcaldía. Lo hizo con un plan de gobierno calcado al de su hermano. Este incluye una fuerte inversión en infraestructura vial, la apertura de una oficina de empleo y el mejoramiento de la red de escuelas del municipio. Ganó con un 22.8% de los votos, superando apenas por 246 votos al candidato de Vamos.
Enrique Xol tuvo que luchar contra el crudo destino de su hermano y utilizarlo a su favor: ganar a pesar de la muerte de su hermano y gracias a la muerte de su hermano.
Los pobladores dudaban del triunfo su candidatura por temor a que sufra la misma suerte que su hermano. En 2019, Livingston había logrado una elección histórica. Por primera vez un candidato había alcanzado la alcaldía con más de cinco mil votos. Pero el triunfo duró muy poco. ¿Y si ahora mataban a Enrique? ¿A quién o a quiénes les asustaba tanto la gestión municipal de los Xol como para impedirla a toda costa?
“Enrique cuenta con el conocimiento apto para poder gobernar el municipio”, explica Adolfo González, el asesor político de los hermanos Xol. “Muchos ignoran que Luis y Enrique trabajan juntos en todos los planes para gestionar y poder coordinar desarrollo de Livingston”, añade. Enrique es también arquitecto del proyecto Xol.
Enrique no es Luis
Ajustada o no, la victoria de Enrique significa una nueva esperanza para la familia Xol, y la base fuerte de votantes que apoyaron a Luis en 2019 y que en 2023 se han decantado por su hermano. Pero Enrique no es Luis.
“La diferencia entre los hermanos Xol, es que Luis fue el de la iniciativa política, la figura, el rostro. Enrique prefirió siempre el detrás de cámaras, las sombras, ir observando, documentando y haciendo los contactos”, explica González. El político y carismático era Luis.
Además, Enrique llegará en 2024 al poder con un partido débil. Cambio fracasó en las elecciones generales de 2023. Su presidenciable, Álvaro Trujillo Baldizón, obtuvo el penúltimo lugar, con apenas un 0.33% de votos.
El partido ganó solo una diputación en el legislativo, gracias a la candidatura en Chiquimula de Esduin Javier Javier, “Tres Kiebres”, también vinculado a narcotráfico. Este curul salvó al partido de su cancelación. Cambio solo triunfó en cinco de alcaldías. Dos en Petén, en La Libertad y Flores; una en Chiquimula, en Ipala; una en Suchitepéquez, en San Gabriel, y la que ganó Enrique Xol en Livingston, Izabal.
Ahora, Enrique, el actual alcalde por el partido fundado por los hijos de Baldizón deberá demostrar en su gestión la confianza depositada en las urnas a la familia Xol. Mientras tanto, la sombra del asesinato de su hermano, electo por el partido de Mario Estrada, le perseguirá durante los próximos cuatro años.