Tras la llegada del coronavirus, el personal de salud tuvo dificultades para ser dotados del equipo de protección y seguridad. Muchos de ellos tuvieron que usar su dinero para comprar mascarillas, trajes, guantes y otros implementos. El Congreso aprobó Q26 millones para que se le diera un bono de riesgo de Q1 mil (durante tres meses) a los trabajadores que atienden a los pacientes, pero tras una decisión del Ministerio de Salud se hizo un único pago de Q870.
Miles de doctores, doctoras, enfermeras, enfermeros y técnicos arriesgan su vida todos los días para cuidar y tratar a los pacientes de coronavirus que son atendidos por el sistema de salud público. La pandemia ha cobrado la vida de decenas de trabajadores de salud que, a pesar de las limitaciones y los riesgos, nunca abandonaron sus puestos.
Como una manera de reconocer la labor de estos héroes, el 5 de abril el Congreso de la República aprobó Q26 millones para un “bono de riesgo para el personal de salud expuesto al COVID-19”. Esto se hizo a través del decreto 20-2020 que validaba una ampliación presupuestaria de Q5 mil 138 millones para el Ejecutivo.
Como únicamente se aprobó un monto y no una forma de distribución, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) entregó el bono a todo el personal que trabaja en esa cartera. Trabajadores que están suspendidos desde marzo por la pandemia y personal administrativo que no tiene contacto con pacientes de coronavirus recibieron el beneficio.
Tras esta decisión de las autoridades, los médicos y enfermeras, quienes exponen su vida a diario ante el virus, recibieron un único bono de Q870. Este monto ni siquiera le alcanza al personal que dejó su casa y alquila una habitación para evitar contagiar a sus familiares.
Bono “único” de riesgo
La doctora Maryandre Posadas es subjefa del área de pediatría del Hospital Roosevelt y jefa del área de shock de Covid-19 para niños. Todos los días se levanta con el temor de contagiarse y enfermar a su mamá y hermana. Calificó como una burla que el Gobierno les dé un bono Q870 cuando se aprobaron cientos de millones para el Ministerio de Salud que no han podido ejecutar por deficiencias.
“Al principio me daba pánico. El ponerse el traje y entrar no es lo difícil, lo difícil es a la hora de salir y no obviar un paso porque de lo contrario puedo contaminarme mientras me quito el traje. El riesgo es llevar el virus a nuestra casa y enfermar a nuestro entorno”, explicó.
Posadas compartió que colegas suyos alquilan apartamentos cerca del Hospital Roosevelt para evitar exponer a sus familias. Esto representa un gasto extra para el personal que puede variar entre los Q1,500 a Q2,000 mensuales. Además, parte del personal compró su propio equipo de protección para evitar contagiarse mientras atendía a sus pacientes.
“Por lo menos todos los residentes (médicos) salieron de sus entornos familiares y fueron a alquilar a otros lados para no estar con ellos e infectarlos. Yo me tuve que alejar de mi hermana y mi mamá para no contagiarlos. Son gastos extras que con Q800 uno no los cubre, no es del todo suficiente. Yo compré una mascarilla espacial que me costó Q900. Esto me ha ayudado a que hasta el día de hoy esté sana”.
Durante la entrevista con No-Ficción, la doctora mostró su malestar porque no se hizo un correcto análisis del Ministerio de Salud para entregar el bono. Argumentó que hay trabajadores que fueron suspendidos durante la pandemia porque son mayores de 60 años y a ellos se les entregó el bono de riesgo. Mientras ellos están en sus casas, sus colegas lidian con pacientes de coronavirus.
“Hay personas que están suspendidas desde marzo por cuestiones de embarazo o porque son mayores de edad y a estas personas también les dieron el bono de riesgo. Ellos no lo necesitan porque no se están exponiendo, están en sus casas, desde marzo no se les ha visto. Entonces, creo que hay gente que lo necesitaba más que otros. No critico esa disposición del ministerio, pero hay unos que tienen más riesgos que otros”.
A decir del diputado presidente de la Comisión de Salud del Congreso, Mynor Mazariegos, los Q26 millones se aprobaron con el objetivo de darle un bono de Q1 mil durante tres meses al personal que estaba en primera línea de atención a los pacientes de coronavirus. Sin embargo, el Ministerio de Salud lo distribuyó a todo el personal producto de presiones.
“El bono de riesgo era de Q1 mil mensuales por tres meses para demostrarles y agradecerles al personal de salud por el trabajo que están haciendo. Después empezó mucha gente a reclamar que todos están en riesgo y el ministerio tuvo que repartirlo en más gente. Pero la intención de nosotros era dárselo a los que están en primera línea”, señaló el congresista.
La postura del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social fue que se hizo una evaluación sobre el riesgo que tiene su personal durante la pandemia y se decidió que todos debían recibirlo. Este beneficio se dio a los trabajadores en los renglones 011, 021, 022, 031 y subgrupo 18 (que incluye los trabajadores temporales de los renglones 182 y 189). En total fueron más de 29 mil los empleados de salud que recibieron el bono único de riesgo de Q870, según cálculos del Ministerio de Salud.
En algunos casos la entrega del bono de riesgo fue más rápida y en otro más lenta. Esto fue porque cada unidad ejecutora (el Ministerio de Salud tiene 89) tuvo que efectuar el desembolso, es decir, el pago de este bono quedó a cargo de cada hospital y dirección de área conforme se hizo el traslado de fondos.
El bono de riesgo en Guatemala para el personal de salud es mínimo en comparación a otros países. Por ejemplo, Bélgica entregó un bono de 1 mil 450 euros (unos Q12 mil) y en Argentina fue de 30 mil pesos (unos Q3 mil). Por aparte, México aprobó un bono mensual equivalente al 20 por ciento del sueldo del personal médico. Este bono lo tendrán mientras dure la pandemia del coronavirus.
Alrededor de 70 niños contagiados de Covid-19 han ingresado al área de shock de la pediatría del Hospital Roosevelt y han sido atendidos por la doctora Maryandre Posadas y su equipo de trabajo. Ella enfatizó que a pesar del abandono del Gobierno en el equipo de protección y el bono de riesgo tan precario no dejaría de atender a sus niños en ningún momento.
Seguro de vida para el personal de salud
El 16 de julio fue presentada por los diputados (y hermanos) Karla y Erick Martínez de la Unidad del Cambio Nacional (UCN) una iniciativa de ley en la que proponen un seguro de vida para el personal de salud. En el documento se establece que el Ministerio de Salud debe contratar un seguro por un monto no menor de Q200 mil.
“El Estado debe, por derecho y como obligación moral, asegurar la subsistencia de la familia del personal de la salud que perdió la vida, por lo que deben de contar con un seguro de vida con el objeto de cubrir gastos por el fallecimiento y demás deberes principales que el personal de la salud tenía cuando estaba en vida”, dice la iniciativa de ley.
La propuesta de los congresistas fue enviada a la Comisión de Salud y Asistencia Social del Congreso para que sea analizada. Tras su revisión, dicha sala recomendaría si es viable o no que sea aprobada por los diputados.
A decir del director ejecutivo del Hospital Roosevelt, Marco Antonio Barrientos, en el centro que dirige han fallecido seis trabajadores a causa de coronavirus. A su consideración un seguro de vida habría ayudado a los trabajadores porque no todos tienen los beneficios establecidos en los pactos colectivos como pasivo laboral o gastos póstumos.
“Han fallecido a la fecha seis compañeros; dos enfermeras, un compañero de rayos x, una compañera de admisión, un compañero de jurídico y un compañero de farmacia. El compañero de farmacia laboró por muchos años bajo el renglón 182, es decir, no tuvo pasivo laboral o auxilio póstumo. Un seguro de vida hubiera servido mucho a estas familias”.
Al inicio de la pandemia el Colegio de Farmacéuticos y Químicos de Guatemala pidió al Gobierno que se otorgue un seguro de vida a los trabajadores de salud que atienden los casos de coronavirus, para que las familias de los fallecidos no tengan que atravesar problemas económicos como lo ocurrido con los médicos y enfermeros que perdieron la vida.
A decir de la doctora Maryandre Posadas, un seguro de vida sería una buena herramienta para respaldar a las familias del personal de salud. “En muchos casos el doctor es el que trabaja en la familia y si se muere: ¿quién por esa familia?, ¿quién por esos niños? Un seguro de vida ayudaría mucho a las familias de los colegas”.
En julio, los diputados de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) propusieron un bono de Q25 mil para el personal médico que resulte contagiado de coronavirus y una pensión de Q5 mil para los hijos del personal que fallezca producto del virus. Esa iniciativa de ley se encuentra en fase de análisis en la Comisión de Salud.
La mínima recompensa
Desde que la pandemia se hizo presente en Guatemala, Zulma Calderon, doctora y jefa de supervisión hospitalaria de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) ha estado velando por el equipo de seguridad para personal de salud.
Con relación al bono, Calderón lo calificó como una cantidad mínima que no compensa la exposición a la que se enfrenta el personal de salud. Agregó que la crisis sanitaria debe ser un punto de partida para ajustar los salarios de los médicos porque estos no están a la altura de la iniciativa privada.
“Es una cantidad muy mínima para todos los riesgos que se corren. En la mayor parte de los hospitales ya lo pagaron y la percepción (del personal) es que no alcanza para casi nada. Más allá de esto se debe evaluar cómo están estructurados los salarios en el Ministerio de Salud porque de forma histórica son salarios fuera de la demanda y no corresponde a la realidad y por eso nadie quiere ocupar esos puestos”, señaló Calderón.
Los médicos que son contratados por el Ministerio de Salud ingresan bajo la categoría de Profesional I y tienen un sueldo base alrededor de Q3 mil 200. Cuando logran una plaza de Profesional II, que significa que tienen una especialidad, llegan a los Q3 mil 500. Con la suma de diversos bonos alcanzan los Q7 mil.
En los hospitales a nivel nacional hay médicos que ganan alrededor de Q15 mil mensuales, pero para llegar a esa cantidad deben tener más de 15 años de trabajar en el mismo lugar.
El ajuste salarial de los médicos y otro bono de riesgo no es un tema de discusión desde el Ministerio de Salud y el Congreso de la República. Para que la iniciativa del seguro de vida para el personal de salud sea aprobada se necesita del apoyo del oficialismo y sus bancadas aliadas. Mientras tanto, los doctores, doctoras, enfermeras y enfermeros que están en primera línea para atender a los pacientes de Covid-19, deberán cuidarse porque saben que no tienen el respaldo del Gobierno.